El grupo Restaurant Brands International (RBI), matriz de las cadenas de comida rápida Burger King, Tim Hortons y Popeyes Louisiana Kitchen, ganó 838 millones de dólares en 2021, un 72% más en comparación con el año anterior, ha informado la compañía.

El resultado neto de explotación (Ebitda) ajustado de RBI llegó a los 2.248 millones de dólares, un 20,6% más.

La facturación fue de 5.739 millones de dólares, un 15,5% más. Por segmentos de negocio, los ingresos de los locales propios crecieron un 18,1%, hasta 2.378 millones, mientras que las comisiones y alquileres cobrados a los franquiciados se situaron en 2.452 millones, un 15,6% más. La contribución de las franquicias a la publicidad fue de 909 millones, un 9% más.

Los costes asociados a los restaurantes en régimen de explotación directa llegaron a 1.890 millones, un 17,4% más, mientras que los gastos generados por las franquicias cayeron un 5%, hasta 489 millones. El coste de la publicidad supuso 962 millones, un 10,6% más, al tiempo que los gastos generales y administrativos experimentaron un alza del 24,8%, hasta 508 millones.

Si se incluyen los datos de ventas de las franquicias, que no se reflejan en las cuentas de RBI por ser empresas independientes, las ventas de todas los locales de la firma fueron de 35.495 millones (31.248 millones de euros), un 13,8% más.