Con una inflación en la eurozona en el 9,9% tocaba subir por tercera vez -tras las subidas de junio y septiembre- el precio oficial del dinero en 0,75 puntos, hasta el 2%. Es decir, el dinero vale ahora lo mismo que en 2009 y, como asegura la presidenta, Christine Lagarde, no se pueden descartar nuevas subidas.

En España el primer efecto se verá en que las hipotecas con los tipos oficiales, también el euribor disparado, se convertirán en un obstáculo difícil de salvar.

En cualquier caso, el proceso de subida del precio del dinero es bueno en sí mismo por cuanto lo anómalo son los tipos cero o negativos. Si el dinero no vale nada todos los factores de la producción se devalúan. 

Aún más importante que la subida del precio del dinero es que el BCE ha reducido su compra de deuda pública. De esta forma, los políticos irresponsables del continente, del tipo Pedro Sánchez, que han comprado popularidad y voto cautivo gracias a una deuda desmesurada se lo pensarán dos veces antes de emitir más bonos.

Y la semana próxima, la Reserva Federal norteamericana hará lo propio. ¡Yehaaaa!