Toma la palabra Rocío Monasterio (Vox), durante el turno de réplicas al discurso de la candidata a presidir la comunidad madrileña, Isabel Díaz Ayuso: "Ni somos parte del Gobierno ni queremos ser de este Gobierno. No queremos ser sus socios", empieza. Su intervención se desliga de la derecha, tanto como de la izquierda, y da en la clave: "la izquierda pone las ideas, el centro las asume y la derecha las gestiona". No obstante, carga contra Ayuso, a quien recuerda que necesita sus votos, que se situarán en la oposición, tras la investidura: "No podemos apoyar todas las medidas del programa del PP y Ciudadanos".

Aborda varios puntos en los que se paró la candidata popular, para explicar sus propuestas, como es el del invierno demográfico. Al tratar este punto, Ayuso apenas habló de fomentar la natalidad, sino que se centró en el área rural y su despoblación. Pues bien, Monasterio le recuerda que "desde aquí financian el aborto, sin hacer ninguna propuesta para la maternidad". Como respuesta, la popular se respalda en la batería de medidas de su partido, como mejorar la conciliación laboral, a la hora de la verdad, insuficientes. Por otro lado, se dirige a Ciudadanos, partido que está a favor de los vientres de alquiler: "¿Esto es lo que nos vienen a proponer a nuestras mujeres? ¿Qué alquilemos nuestros vientres? Es fantástico", ironiza.

No podemos apoyar todas las medidas del programa del PP y Ciudadanos

Presta especial atención al tema de la educación, donde hace un inciso para contestar a la declaración de Isabel Serra, de Podemos, que decía lo siguiente: "La educación pública tiene como objetivo proteger a los niños de padres como usted". Monasterio responde: "Hemos pactado con el PP (...) para librarles de personas y de políticos como la señora Serra, a quien le ha faltado proponer que me arrebataran a mis hijos. Lo han escuchado todos ustedes".

"Pronto nos dirán que apoyar a las familias es de fachas, pero no hay nada más moderno y revolucionario que defender a las familias. Es el único espacio de libertad que está a salvo -de momento- del consenso progre", añade la candidata de Vox. Asimismo, repara Monasterio en una medida que propuso su grupo y que lleva pasando desapercibida desde entonces: el cheque escolar. Según comenta: "amplía las oportunidades, mejora la calidad de la educación, permite que los padres elijan de acuerdo a la calidad de los centros". Añade que las propuestas para garantizar la libertad de educación son "mecanismos para proteger" a los hijos. "Queremos que los políticos quiten las manos de encima de nuestros niños", sentencia.

Pronto nos dirán que apoyar a las familias es de fachas, pero no hay nada más moderno y revolucionario que defender a las familias

Respecto a la economía de la comunidad, subraya que la deuda madrileña asciende a 33.000 millones de euros, hecho que "hay que decirlo muy clarito" y que evitó mencionar la candidata popular a la presidencia en su intervención. Además, destaca que pasar de nueve a trece consejerías le parece un error que terminará aumentando el gasto. "Nosotros venimos a limpiar la ciénaga y a limpiar chiringuitos", avisa.

Por último, insiste en que "Vox no renuncia a ninguno de sus contenidos programáticos". Recuerda que una vez se apruebe la investidura de Ayuso su partido se situará en la oposición: "No podemos apoyar todas las medidas del programa del PP y Ciudadanos". De cara al acuerdo que firmó con el PP, ha pedido que se respete a los votantes de Vox, alegando que "no retrocederemos ni un milímetro".

A destacar, un mensaje al socialista: "Señor Gabilondo, no podríamos votarle, es un hombre inteligente en un partido equivocado".