Agentes de la Comisaría General de Información de la Policía han detenido esta mañana a cuatro individuos, dos de ellos en la localidad de Bolaños de Calatrava (Ciudad Real) acusados de formar un grupo de marcado carácter yihadista. El líder de la célula, un marroquí huido de su país, fue quien captó a todos ellos y llevaba años en el foco de los investigadores, informa ABC.

Este individuo, que escapó de una operación de la DGST marroquí, se afincó primero en Barcelona, donde se le detectó y comenzó a ser vigilado. En los últimos tiempos la crisis del coronavirus había afectado seriamente su economía hasta el punto de que se trasladó a la citada población para trabajar en el campo, añade ABC.

Este sujeto mostraba últimamente una clara intención de perpetrar atentados, lo que ha llevado a los investigadores a actuar de inmediato para evitar cualquier peligro. Además, tenía contactos con combatientes de Daesh y utilizaba para sus comunicaciones un avanzado sistema que destruía todos los mensajes una vez finalizado el contacto. A pesar de ello, hay abundantes pruebas contra él, también en lo que se refiere a su faceta de captador, explica el mismo medio.

Los cuatro detenidos van a ser interrogados en las dependencias policiales de Canillas y no está claro que todos ellos pasen a disposición judicial, el próximo viernes, lo que dependerá de las diligencias policiales y del resultado de los registros. En este sentido, los policías han intervenido documentación en la vivienda de los sospechosos, y también se ha encontrado un arma blanca, aunque no se puede conectar con un hipotético atentado. También hay otros dos investigados en esta operación que no han sido arrestados, añade ABC.

El titular del Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional dirige la operación.