Philips ha reducido un 39% su beneficio neto en el primer semestre, hasta los 246 millones de euros, por culpa del impacto del coronavirus. Eso sí, espera “volver al crecimiento y mejorar la rentabilidad” en la segunda mitad del año, según ha señalado el CEO, Frans van Houten.

La multinacional de tecnología holandesa ha registrado también menores ventas, que se han situado en 8.554 millones (-3%), pese a la mayor facturación del área de cuidados conectados (ventiladores de hospital, imagen diagnóstica y monitores), que se disparó un 11,6%, hasta 2.427 millones. Por su parte, la división de diagnóstico y tratamientos bajó a 3.746 millones (-1%) y la de sanidad personal se desplomó un 16,6%, hasta 2.207 millones.

En el caso de Philips, la pandemia trajo peores consecuencias en el primer trimestre, cuando ganó 38 millones, un 76,8% menos que en el mismo periodo de 2018. Y es que entre los meses de abril y junio, el beneficio neto ha sido de 208 millones, tan sólo un 14,4% inferior al de hace un año.