El autor del atentado ocurrido en Christchurch, en la mezquita neozelandesa, Brenton Harrison Tarrant se enfrenta a 50 cargos por asesinato -uno por cada víctima mortal y 39 por intento de homicidio. Además, la Justicia contempla otros cargos que están bajo consideración.

Tarrant comparecerá por videollamada en lo que el magistrado califica como una sesión “relativamente corta”, que estará cerrada al público. Así, el juez Cameron Mander ha prohibido la entrada a las cámaras y periodistas, ya que a la vista solo acudirán el juez, el abogado, el acusado, la seguridad del tribunal y el agente de Policía a cargo del caso. En las causas, explican, no quieren que corra riesgo el derecho a un juicio justo, así como el análisis de hechos de carácter confidencial que se manejan.

Tarrant comparecerá por videollamada en lo que el magistrado califica como una sesión “relativamente corta”, que estará cerrada al público

El acusado, de 28 años, fue puesto en prisión preventiva tras su primera comparecencia. Desde entonces, se encuentra en la prisión de Paremoreno, Auckland. Una cárcel de alta seguridad en donde se encuentra aislado.

El joven está acusado de matar a 50 personas que se encontraban en la mezquita Al Noor, y de retransmitir los hechos en directo a través de Facebook. El Gobierno Australiano no ha ignorado este hecho y anuncia penas de cárcel -de hasta tres años- para los directivos de las empresas que difundan contenidos violentos. Y es que la red de Zuckerberg tuvo que eliminar más de un millón y medio de vídeos del atentado neozelandés, que uno que podía encontrar en el otras como Twitter, YouTube, etc.