Los analistas han aplaudido la fusión entre Telecinco (o sea, Mediaset España) y Mediaset Italia, dando lugar a MediaForEurope (MFE), a pesar de que ha sido una trampa de los Berlusconi para ganar poder. Y es que el pasado viernes, se calentaron los rumores de OPA sobre la filial española, operación que fue desmentida, pero horas más tarde, se anunció la fusión.

Un ahora sí, ahora no, ahora sí, donde Fininvest, el grupo financiero de los Berlusconi y máximo accionista tanto de Mediaset España como de Mediaset Italia, ha salido ganando: controlará el 35,43% de MFE y tendrá más del 50% de los derechos de voto. Asimismo, controlará el Consejo, que tendrá 14 sillas y ocuparán actuales consejeros de Mediaset Italia (Pier Silvio y Marina Berlusconi, Marina Brogi, Francesa Mariotti, Danilo Pellegrino, Stefano Sala y Carlo Secchi) y Mediaset España (Paolo Vasile, Consuelo Crespo y Borja Prado) o de ambas (Fedele Confalonieri, Marco Giordani, Niccolo Querci y Gina Nieri). 

Claro que entre los consejeros, los más importantes serán, como bien saben, los seis ejecutivos: Pier Silvio Berlusconi, Giordani, Nieri, Querci, Sala y Vasile. Eso sí, que Vasile no se haga ilusiones porque teniendo la misma categoría que el segundo hijo del ex primer ministro italiano y actual CEO de Mediaset Italia, no tendrá el bastón de mando en sus manos (y no hay que olvidar que Pier Silvio y Marina no le querían como primer ejecutivo del grupo). 

Fininvest, el grupo financiero de los Berlusconi, será el máximo accionista de la fusionada, tendrá más del 50% de los derechos de voto y controlará las 14 sillas del Consejo

Los analistas han aplaudido la operación porque tiene “sentido estratégico” en un entorno en el sector con caída de los ingresos publicitarios y mayor competencia, tras la entrada de Netflix, HBO y Amazon Prime Video, entre otras. Al mismo tiempo, creen que servirá para plantar cara a los rivales con mayor fortaleza. Y por supuesto, han visto con buenos ojos, que se proteja el contenido nacional tanto en Italia como en España (donde es la reina de la telebasura) porque en caso contrario peligrarían sus respectivos liderazgos. Los únicos inconvenientes que han señalado es la baja valoración que han tenido las acciones de Telecinco -motivo por el cual, la fusión no gusta en la Bolsa de Madrid- y el riesgo de que la operación no salga, pues no se sabe que hará Vivendi.

La fusión necesita el respaldo de más del 95% de los respectivos capitales de las cotizadas italiana y española... y aún no se sabe la postura de Vivendi

El grupo francés no es un actor cualquiera, sino que será el segundo accionista de la fusionada MFE, tras Fininvest: Simon Fiduciaria, el holding controlado por Vivendi, tendrá el 15,39% y la propia Vivendi, el 7,71%. Ahora todo depende de los accionistas, que decidirán sobre la fusión en las Juntas Generales Extraordinarias que celebrarán Telecinco y Mediaset Italia el próximo 4 de septiembre: se necesita el respaldo de más del 95% de sus respectivos capitales. Eso sí, los accionistas que quieran retirarse podrán hacerlo, aunque hay un límite: las devoluciones no superarán los 180 millones de euros.

Y por cierto, respecto a la evolución bursátil, se ha relajado el comportamiento del pasado lunes, pero Telecinco sigue a la baja, mientras Mediaset Italia se mueve al alza. En concreto, este martes, la primera ha caído un 0,03%, por lo que prácticamente se ha quedado estable en los 6,54 euros; y la segunda ha subido un 0,93%, hasta los 2,84 euros, tres céntimos por encima del día anterior. ¿La razón? Porque como decíamos ayer, la ecuación de canje no favorece a los accionistas españoles, pero sí a los italianos... otra muestra de cómo la familia Berlusconi está utilizando a Telecinco para engordar más sus cuentas y su poder.