El Parlamento israelí ha dado un paso más hacia nuevas elecciones apenas unas semanas después de los últimos comicios legislativos, al votar en primera lectura un texto para su propia disolución. El texto ya había sido aprobado para lectura preliminar el lunes y aún debe leerse en la segunda y tercera lecturas. Ha sido aprobado este martes por 66 votos a favor y 44 en contra, según la web del Parlamento. Las elecciones están previstas provisionalmente para el 17 de septiembre, informa El Periódico.

La presentación de este texto es el resultado del impasse en el que se encuentran las negociaciones lideradas durante semanas por el primer ministro saliente, Benjamin Netanyahu, para formar una coalición de gobierno. El desenlace de la crisis sigue siendo totalmente incierto. Netanyahu tiene hasta este miércoles por la noche para lograr sus fines y convencer a su exministro de Defensa, Avigdor Lieberman, de Israel Beitenu, para que participe en su gobierno, en cuyo caso el texto de disolución será letra muerta. Pero la Knesset podría proceder a los votos de segunda y tercera lectura si parece que Netanyahu fracasa el miércoles por la noche, añade este mismo medio.

El Likud de Netanyahu y otros partidos de derecha ganaron el 9 de abril, y el presidente dio instrucciones al primer ministro saliente para formar un gobierno de coalición

Netanyahu es visto como el instigador de esta maniobra, que tendría como objetivo evitar que el presidente Reuven Rivlin le dé a otro parlamentario la oportunidad de formar un gobierno. Si la Knesset se disuelve, los israelíes serán llamados a las urnas unos meses después de votar el 9 de abril. Una circunstancia que se produciría por primera vez en la historia de Israel.

El Likud de Netanyahu y otros partidos de derecha ganaron el 9 de abril, y el presidente dio instrucciones al primer ministro saliente para formar un gobierno de coalición, concluye El Periódico.