El Congreso activará esta semana la tramitación parlamentaria de la reforma de la Ley de Indultos de 1870, que fue impulsada en su día por el PSOE para no conceder este 'perdón' a los condenados por corrupción o por violencia machista y que ahora el PP quiere extender a penas de rebelión para prohibir medidas de gracia a los presos independentistas por su implicación en el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017, recoge eldiario.es.

La tramitación se 'congeló' hace un mes y medio porque el PSOE, promotor de la iniciativa, planteó la necesidad de abrir una ronda de comparecencias en la Comisión de Justicia antes de seguir la tramitación de la reforma, todo ello pese a que las enmiendas llevan meses registradas, desde el pasado mes de febrero.

Desde que pasó a la oposición, el PP ha venido denunciando las "maniobras" del PSOE para retrasar la reforma de la Ley de Indultos

Esa solicitud soliviantó al PP, que se apresuró a censurar a los socialistas por pretender ralentizar la tramitación de esa reforma para no tener que votar la referida enmienda, con la que busca que los condenados por rebelión o sedición no sean perdonados.

Con ello, los 'populares' pretenden que los líderes del 'procés' que acaben siendo condenados por el Tribunal Supremo por la organización del referéndum soberanista del 1 de octubre de 2017 no puedan llegar a ser indultados.

Desde que pasó a la oposición, el PP ha venido denunciando las "maniobras" del PSOE para retrasar la reforma de la Ley de Indultos, cuya celeridad exigían los socialistas cuando no estaban en el Gobierno. "Los indultos son la moneda de cambio de Sánchez para mantenerse en Moncloa", sostiene la portavoz de los 'populares' en el Congreso, Dolors Montserrat.