Amazon ha sido denunciado por monopolio en Washington DC, la capital de EEUU. Sin embargo, si se tiene en cuenta lo ocurrido hasta ahora con otras demandas, es muy probable que se vaya de rositas o con un leve castigo, porque sólo se aplicaría allí. ¡Lástima!

El fiscal general del Distrito de Columbia, Karl Racine, ha señalado en la demanda y en un comunicado que “las políticas de Amazon han impedido que las plataformas competidoras, incluidas las de los propios vendedores, bajen precios y ganen así cuota de mercado”. En concreto, ha cargado contra el requisito que el gigante estadounidense de comercio electrónico fija a las empresas que quieren vender a través de su portal, que establece que estas no puedan ofrecer esos mismos productos en otras páginas web a un precio más bajo. Así, considera que atenta contra las leyes de la libre competencia y perjudica al consumidor, que termina pagando precios más altos.

El fiscal carga contra el requisito que Amazon fija a las empresas que quieren vender a través de su portal: estas no pueden ofrecer esos mismos productos en otras páginas web a un precio más bajo

Racine ha subrayado que Amazon “maximiza sus ganancias a expensas de terceros vendedores y consumidores, al tiempo que daña la competencia, sofoca la innovación e inclina ilegalmente el cambo de juego a su favor”. Al hilo de esto, conviene recordar los últimos resultados del gigante estadounidense del comercio electrónico que dirige Jeff Bezos (que dejará el día a día en verano) ha ganado 6.706 millones de euros en el primer trimestre, más del triple que hace un año, y ha ingresado 89.764 millones (+43,8%) y ya casi lo mismo por vender productos (47.555 millones) que por servicios (42.209 millones).

Por el contrario, Walmart, el gigante estadounidense de distribución minorista, no ha empezado tan bien el año en lo que a resultado se refiere: ha tenido un beneficio neto de 2.232 millones en su primer trimestre fiscal (febrero-abril), un 31,6% menos por atípicos financieros. Eso sí, ha facturado 113.101 millones (+2,7%), una cifra superior a la lograda por Amazon entre enero y marzo, y que podría usar este último para aludir a que no es un monopolio… Y es que el problema es saber qué mercado de referencia se considera, porque Bezos siempre ha defendido que sólo supone el 1% del mercado mundial de la distribución y su cuota llega como mucho al 4% en EEUU, aunque según la consultora eMarketer, representaría cerca del 40% del mercado en dicho país, ocho veces más que Walmart (alrededor del 5%), que es el segundo jugador.

El problema es saber qué mercado de referencia se considera: Bezos siempre ha defendido que sólo supone el 1% del mercado mundial de la distribución y su cuota llega como mucho al 4% en EEUU, aunque según la consultora eMarketer, representaría cerca del 40% del mercado en dicho país, frente al 5% de Walmart

Amazon ha respondido a la demanda del fiscal Racine que “como cualquier otra tienda” se reserva el derecho a no presentar ofertas a los consumidores “que no tengan un precio competitivo” y su portavoz, Jack Evans, ha remarcado que el fiscal ha entendido las políticas de la empresa “exactamente al revés”. No es la primera demanda ni investigación que afronta Amazon, entre ellas, está el hecho de que la Comisión Federal de Comercio de EEUU (FTC, por sus siglas en inglés) investiga desde 2019 si utiliza su poder de mercado para perjudicar a la competencia, o las investigaciones en los estados de California y Nueva York. Al otro lado del océano Atlántico, hasta ahora, Amazon sólo ha recibido una multa por un tema fiscal en 2017 por su sede en Luxemburgo (la Comisión Europea le obligaba a devolver 250 millones), pero recientemente, el Tribunal General de la UE ha anulado la decisión de Bruselas, estimando el recurso del gigante estadounidense, y ahora se espera una resolución definitiva.

Amazon pretendía comprar Metro Goldwyn Mayer, aprovechando la sangría de pérdidas de este gran estudio de cine de Hollywood, y lo ha logrado: cierra un acuerdo a cambio de unos 6.900 millones de euros por más de 4.000 películas y 17.000 series)

Y por si no fuera bastante el monopolio que ejerce sobre el comercio electrónico, destruyendo, cada vez más, al pequeño comercio, ahora Amazon quiere jugar fuerte en contenidos: no quiere quedarse atrás en la industria audiovisual y en la fuerte competencia que hay en el streaming. Por ello, pretende comprar Metro Goldwyn Mayer (MGM)... aprovechando la sangría de pérdidas que tiene uno de los grandes estudios de cine de Hollywood. Una pretensión que este miércoles se ha convertido en realidad: ha llegado a un acuerdo para comprar MGM (o sea, más de 4.000 películas y 17.000 series de televisión) por unos 6.900 millones de euros, siendo su mayor adquisición desde 2017 y su mayor inversión hasta ahora en el negocio de medios y entretenimiento. “Estoy muy orgulloso de que el león de MGM, que ha evocado durante mucho tiempo la Edad de Oro de Hollywood, continuará con su historia”, ha señalado Kevin Ulrich, presidente de la junta de MGM.