Sr. Director:

Cualquiera diría que es broma, pero no. El Gobierno de Vietnam ha prohibido a sus funcionarios que halaguen a sus superiores en el espacio de trabajo. La verdad es que la noticia da que pensar. Se suele decir que si hay una norma que pueda parecer obvia, es que ya ha ocurrido algún que otro percance… pues bien, ¿en qué momento se le ocurre al Gobierno plantear la prohibición?

Solo queda esperar para que se especifiquen las “medidas disciplinarias” a las que serán sometidos los rebeldes. No sé, yo me los imagino en un campamento con un tipo parecido al sargento de infantería Hartman, hasta se les olvidaran todos los piropos y halagos que conocen. Seguro que así se dejarían de tonterías.