Sr. Director:

​La Junta de Castilla y León, gobernada por el Partido Popular desde 1987, parece echarse también en brazos de la ideología de género al implantar un protocolo adoctrinador para la escuela, sin necesidad siquiera de aguardar a ninguna ley autonómica ni estatal. Con el habitual lenguaje alambicado y equívoco, las nuevas directrices llevan por nombre "Protocolo de atención educativa y acompañamiento al alumnado en situación de transexualidad y alumnado con expresión de género no normativa", que ha sido diseñado por la propia Consejería de Educación. El mencionado Protocolo obliga, entre otras cosas, a que haya baños mixtos en los centros, o a que los profesores se dirijan a los alumnos por el nombre elegido en función de su identidad de género, independientemente de lo que figure en los datos administrativos.