El fútbol femenino español ha desarrollado su primera jornada de huelga que en el tarde del lunes ha quedado paralizada por un acuerdo entre las partes implicadas. El parón se hizo oficial con el acta del encuentro entre el Espanyol y el Granadilla de Tenerife. Ambos equipos se negaron a disputar el encuentro, ejerciendo su derecho a acudir a la huelga convocada por la AFE (Asociación de Futbolistas Españoles) y los sindicatos ON y UGT.

Las jugadoras exigían un sueldo mínimo de 16.000 euros anuales, que los clubes dicen no poder asumir. Pero además, querían abordar temas como la maternidad, la incapacidad o las vacaciones. En el primer punto sí podrían alcanzar la igualdad con los jugadores de fútbol, pero en el segundo, ya es más difícil.

A las jugadoras las apoyaron futbolistas como Borja Iglesias, Lucas Pérez o Antoine Griezmann.

Pero si la cuestión es plantear si deportistas masculinos y femeninos deben percibir los mismos ingresos, recordemos la opinión de Nadal para quien las retribuciones no dependen tanto del género masculino o femenino como, a fin de cuentas, de los ingresos que se generen.  

O, ya en el terreno artístico, nos encontramos con Paulina Rubio que, franca y directa, afirma que a las mujeres: “Nos pagan igual que a ellos o un poquito más”.