Parece que se ha encontrado el elixir de la eterna juventud; el sistema de descanso Hogo. Traducido… una cama de toda la vida, pero con un colchón de lujo. Está hecho a mano y confeccionado con materiales naturales y de máxima calidad.

Los efectos rejuvenecedores de este sistema los ha descubierto el estudio Efecto del descanso sobre materiales naturales y libres de campos electromagnéticos en el sistema inmunitario y la edad biológica, dirigido por la doctora Mónica de la Fuente, catedrática del Departamento de Genética, Fisiología y Microbiología de la Facultad de Biología de la Universidad Complutense de Madrid (UCM).

El sistema Hogo funciona así: con una malla patentada de grafito y plata conectada a una toma de tierra, el sistema cuenta con una tecnología única que consigue crear un ecosistema natural y aislar nuestro organismo de campos electromagnéticos, eliminando también la contaminación electromagnética acumulada durante el día. A mí me suena algo complicado, pero, no se preocupen, que no da calambre ni nada de eso. Es todo muy natural y muy cómodo. ¡Ah! Y por solo 35.000 euros la unidad. No me parece caro si me quito 15 añitos de encima… y encima, durmiendo en este colchón también mejoro mi sistema inmunitario, o sea, que aumento mis defensas. Sin tomar bífidus ni nada de eso, solo con dormir. ¡Vaya chollo!

Y para terminar, por si tuviera pocos beneficios, además, la cama, está hecha con materiales producidos de forma sostenible y recolectados siguiendo los más altos estándares éticos. ‘Eco-Friendly’, ¿qué más se puede pedir?