• Naturalmente, no lo ha dicho así, pero ha dado por bueno el borrador presentado, en rueda de prensa, por el SUP.
  • Dicho de otra forma, los catalanes acudirán a las urnas con la sospecha de que el hijo de Jordi Pujol y el padre de Artur Mas cometieron delito.
  • Soraya asegura que Asuntos Internos (Interior) está investigando el origen de la filtración.
  • Y por si esto no basta, recuerda la existencia de casos judiciales que afectan a los líderes convergentes.
  • Y advierte al fiscal catalán que se ha querellado contra El Mundo que está atentando contra la unidad de acción y el orden jerárquico de la Fiscalía.

La rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros del viernes 23 ha estado monopolizada por el famoso informe sobre las presuntas actividades irregulares de los líderes de CIU, denunciadas por el diario El Mundo. Soraya Sáenz de Santamaría (en la imagen) ha dado a entender con claridad meridiana a los líderes de CIU, cada vez que era preguntada sobre la veracidad del informe que "que no se puedan tener cuentas fuera de España sin que estén declaradas, y hay que pagar por los rendimientos de esas cantidades en el extranjero", poco más o menos las mismas palabras pronunciadas por Montoro, que le han costado que Durán i Lleida pidiera la comparecencia del Titular de la cartera de Hacienda en el Congreso.

La vicepresidenta Soraya, que se ha permitido orientar la rueda de prensa a su antojo dos días antes de las elecciones catalanas con una enorme maestría, ha dado por bueno el informe presentado por el SUP una hora antes de su comparecencia, al afirmar que es tarea de la policía investigar lo que en él se contiene, aunque no ha querido responder a las críticas del propio Sindicato Unificado de Policía, que señalan que cuando se investiga a aledaños del poder o a partidos políticos no se utiliza la diligencia que se debiera. "Lo que ha de hacerse es investigarse; lo que pide el Gobierno es que se investiguen todos esos extremos por quien corresponda", ya sea Hacienda, la Policía, los jueces o la Fiscalía.

Lo que parecía un auténtico chiste -dadas las circunstancias: la rueda de prensa del SUP y la repentina aparición del informe, que no encontraban en el Ministerio del Interior- es que Soraya haya resaltado que la brigada de Asuntos Internos de la Policía esté investigando quien ha sido la persona que lo ha filtrado. Sólo ha faltado que lo repartieran como si fueran estampitas con un donuts de regalo.

Este fin de semana los catalanes se enfrentan a unas elecciones a las que acudirán con la sospecha de que el padre de Mas y el hijo de Jordi Pujol, Josep Pujol Ferrusola han estado implicados en supuestas actividades ilícitas como el cobro de comisiones y evasión de impuestos.

Pero Soraya ha proseguido con sus afiligranados y limpios ataques al partido que se enfrenta a la candidata del PP, Alicia Sánchez Camacho este domingo. Ha recordado en varias ocasiones que "son múltiples y variados los procedimientos judiciales que afectan a CIU, así como a sus miembros", y ante las múltiples preguntas sobre la veracidad de la información contenida en el informe y si Hacienda disponía de información al respecto, ha manifestado que "cometería un delito si revelara datos de esta naturaleza", y ha hilvanado la frase con el recuerdo de que la amnistía fiscal termina este domingo. "De esto se extrae una pedagogía aplicable, los ciudadanos que tengan cuentas fuera tienen la obligación de declararlas, y es labor de Hacienda investigar, averiguar y hacer pagar".

También ha aprovechado para advertir al fiscal superior de Cataluña, Martín Rodríguez Sol -quien ha anunciado la incoación de diligencias de investigación contra El Mundo, y cuya actuación ha sido desautorizada por su jefe, Eduardo Torres-Dulce- que "la posición de un fiscal ha de ser de unidad de actuación y dependencia jerárquica", y esto es así, ha añadido, por "mandato constitucional".

Sara Olivo

sara@hispanidad.com