• "Hacemos nuestro el compromiso de resistencia cívica y organizada contra el régimen", dice Violeta Granera, dirigente del Frente Amplio por la Democracia (FAD).
  • La oposición, excluida de los comicios del 6 de noviembre, alega que la pareja presidencial pretende establecer una dinastía familiar similar a la de los Somoza.
El presidente nicaragüense, Daniel Ortega, fue investido este martes para su cuarto mandato, de cinco años, y tercero consecutivo, está vez junto a su esposa, Rosario Murillo (ambos en la imagen), como vicepresidenta, algo inédito en la historia de Nicaragua. Ortega y Murillo fueron investidos en presencia de sus aliados y homólogos Nicolás Maduro, de Venezuela, y Evo Morales, de Bolivia, en un acto celebrado en la Plaza de la Revolución, en Managua, informó Efe. La presencia de Maduro y de Morales da una idea muy clara de qué tipo de régimen es el nicaragüense, por aquello de 'dime con quién vas y te diré quién eres'. La buena noticia es que la oposición nicaragüense anunció que luchará de manera cívica contra el gobierno del presidente Daniel Ortega, recoge Infobae. "Hacemos nuestro el compromiso de resistencia cívica y organizada contra el régimen" de Ortega y Murillo, el cual "no aceptamos como legítimo", afirmó la dirigente del opositor Frente Amplio por la Democracia (FAD), Violeta Granera, al leer una proclama en un acto en Managua. La oposición, que fue excluida de los comicios del pasado 6 de noviembre, considera que la asunción en el poder de la pareja presidencial es ilegítima debido a la alta abstención en las elecciones en que fueron elegidos. Según el FAD, más del 70% del electorado no votó, mientras que el Consejo Supremo Electoral (CSE) dice que el abstencionismo fue del 31 por ciento. Según el CSE, Ortega ganó los comicios de noviembre con el 72,5% de los votos, para su tercer mandato consecutivo desde 2007. La oposición alega que la pareja presidencial pretende establecer una dinastía familiar similar a la de los Somoza, que gobernó casi medio siglo hasta el triunfo de la revolución de 1979. "Este martes está iniciando una nueva dictadura dinástica de una familia con Ortega en la presidencia, Murillo en la vicepresidencia y los hijos en el control de las empresas y de los canales de comunicación", dijo a la AFP el exdiputado Víctor Tinoco, un disidente sandinista. "Hoy se está reinstaurando una dictadura familiar y dinástica al mejor estilo de la familia Somoza. Hoy es un día trágico para Nicaragua. Debemos apelar a la lucha cívica para recuperar el régimen democrático", declaró por su parte Hugo Torres, directivo del Movimiento de Renovación Sandinista. José Ángel Gutiérrez joseangel@hispanidad.com