Esta semana es la semana de "Día por la vida". Un día que defiende toda una vida... ¡Vergonzoso! Migajas que casi ninguno medio de masas se hará eco de él como cuando toca el día del cáncer de mama (por supuesto, porque la próstata ni existe), el de la mujer trabajadora, la biosfera, el orgullo gay, etc. ¿Saben por qué? Porque la "vida" no se incluye entre las nuevas religiones políticas promocionadas por el Nuevo Orden Mundial. El mundo está dividido en los defensores de la vida, que se nos tachan de intolerantes, fachas, ultra católicos y antiguos. Y al otro lado los promotores del aborto: súper guais, comprensivos con la mujer sufriente (porque los hombres no sufrimos, ya saben), abiertos al cambio antropológico, enamorados de los derechos humanos y contrarios a la pena de muerte... En fin, todo muy coherente. Si ustedes son curiosos y están empeñados en saber más sobre por qué hay que defender la vida en cualquier caso, en más de una ocasión se habrán asomado a uno de esos libros provida que a todos les encanta y pocos, muy pocos, leen. ¿Pero qué pasa con los libros provida? Para empezar porque muy pocos sellos son valientes para editarlos. La editorial Sekotia es la más prolija y sabe que su lucha es batalla aparentemente estéril pero sin embargo necesaria, porque se vendan o no (más bien poco), combaten la opinión contraria a que la vida se pueda relativizar. Si nadie dice que no, al final tendrán razón aunque sea mentira lo que digan. ¿Por qué se leen poco esos libros? Porque con este tipo de libros ocurre que los que están a favor de la vida dicen: "No, yo estoy de acuerdo con no abortar, no necesito libros". ¡Error craso porque defienden la vida por tradición, pero sin fundamentos! Luego están los que van en contra de la vida: "Yo no quiero libros de esos, estoy a favor del derecho de las mujeres...". Claro, son más coherentes y además no vayan a convencerse de lo contrario. Al final queda una fina y delgada línea que son los profesionales, los orientadores a los que les afecta de verdad el problema y no saben cómo actuar para resolverlo. Todo comienza con el aborto, un gran negocio piramidal, el Imperio de la Muerte, donde la materia prima es la mujer embarazada y sus "derechos" la engañiza. Nunca se dan soluciones para evitar matar al hijo que llevan en su vientre, solo hay soluciones que conducen a los abortorios. Pero ya están los señores de Podemos asomando la patita de la eutanasia, próxima batalla en la que todos nosotros nos veremos enzarzados en un programa sentimentalista cuya única solución pasa por matar, así de claro: matar. Eso sí, todo muy aséptico y con mucha dignidad. Esta semana es la semana donde se celebra el Día por la vida, promovido por más de 500 asociaciones y plataformas que defiende la vida desde su concepción hasta la muerte natural. El martes 21 dirigí y presenté un nuevo programa en Radio Ya de Somos Libro, dedicado a la defensa de la vida. A lo largo de los 90 minutos del programa hablamos de los discutidos y discutibles derechos de la sociedad posmoderna que pasan por supeditar la muerte a la vida. El derecho más básico, que es el de nacer, es suprimido por la ley y los supuestos derechos de las mujeres para estar en igualdad con el hombre. En los micros estuvieron Álvaro Ortega con Duarte Falcó Fundación Vida y Amaya Azcona Red Madre. Y a río revuelto les presento libros que defienden la vida porque lo mismo doy buenas ideas: Mujeres silenciadas (Sekotia), de Theresa Burke Un libro imprescindible para comprender y tratar el SPA (síndrome post aborto). Un repaso fiel e impactante de las experiencias de la doctora  terapeuta y autora de la obra, de cientos de mujeres con secuelas emocionales provocadas por abortos. La Dra. Burke expone los obstáculos en el camino hacia la recuperación tras el aborto, repasa los distintos y profundos problemas de adaptación del posaborto e ilustra cómo podemos crear una sociedad más comprensiva y saludable en la que las mujeres no tengan que ocultar más su dolor. Ya es hora de escuchar y ayudar. Libro imprescindible para psicólogos, psiquiatras, personas relacionadas con el mundo sanitario (por supuesto médicos también), orientadores, profesores y... ¡padres y sacerdotes! No lo dejen caer en saco roto. Secretos: 15 mujeres se confiesan (Edibesa), de Juan José Montes. No todo son abortos, ni mujeres abocadas a ello. Hay mujeres valientes que se dieron la vuelta y decidieron no hacerlo, en algunos casos in extremis, quizá solas y apechando las consecuencias duras del momento, pero que seguramente se tornaron felices al tener a su niño en brazos. 15 testimonios de mujeres que pueden muy bien servirnos de acicate para ver que hay vida más allá de un embarazo (entiéndanme el giro). Pero que seguramente les serviré de ejemplo para apoyar, ayudar y animar a personas, mujeres y hombres también, para luchar contra la idea mortal del aborto. Seducidos por la muerte (Planeta), de Herbert Hendin. Fíjense los años de este libro: escrito en 1996 y publicado en España en 2009... Y va a ser ahora cuando más sentido tenga, porque ante las propuestas de muerte de Pablo Iglesias, Rajoy calla, eso es que ya se está haciendo la cama. Como dice la sinopsis del libro: "Un libro imprescindible para afrontar el debate sobre la eutanasia y el suicidio asistido. La realidad de lo que pasa hoy en Holanda es el mejor alegato en contra de la cultura de la muerte." Una obra que será polémica en breve y que usted deberá conocer antes de que la retiren del mercado por dar ideas contrarias al pensamiento dominante. Recuerden que bajo el paraguas del sentimentalismo donde se relativiza todo, la eutanasia será servida como servicio social a los más débiles primero, a los menos productivos después. Ya la sociedad global tiene bastante experiencia en todo esto, recuerden que la muy democrática Alemania de Hitler lo hizo, y de manera muy eficaz... Humberto Pérez-Tomé Román @hptr2013