Informábamos en Hispanidad sobre la salvación del empresario Iglesias: Pablo consiguía 147.000 de sus simpatizantes, para ampliar la Taberna Garibaldi... pero pedia más

Y así, el podemita, prorrogaba la campaña de donaciones, iniciada en marzo, 39 días más. Y, lo más original de todo, Iglesias aseguraba que se veía obligado a amplíar su negocio por culpa de Almeida, ya que el consistorio madrileño impuso una multa al local por exceso de aforo.

Ahora, el podemita y sus socios anuncian -tras "unas vacaciones bien merecidas" (recaudar donaciones da mucho trabajo)- que la antigua Taberna Garibaldi se cierra pero, que no cunda el pánico, porque comparten también que abrirán un nuevo local, ubicado en una zona más céntrica de Madrid. A ver si lo van a abrir cerca de la nueva vivienda del alcalde Almeida...