Comenzamos esta crónica semanal sobre cristianos perseguidos en Nepal. En ese país, en la ciudad de Katmandú, dos cristianos procedentes de EEUU estaban evangelizando cuando fueron detenidos por la policía, informa Puertas Abiertas.

Los agentes se hicieron con todos sus objetos y les encerraron en celdas diferentes para que no pudieran comunicarse. Afortunadamente, un grupo de líderes cristianos consiguió que les liberaran tras seis horas y no se interpuso ninguna denuncia contra ellos.

Aunque Nepal ya no es un estado hindú oficialmente, la mayor parte de la persecución cristiana en Nepal proviene de grupos hindúes radicales que quieren que el país vuelva al hinduismo. Muchos de los cristianos en Nepal son conversos del hinduismo, y estos conversos experimentan una presión significativa por parte de sus familias y comunidades. Si una familia descubre que un miembro es cristiano, el converso puede ser expulsado de su hogar familiar o incluso atacado violentamente. También limitan la libertad religiosa las leyes contra la conversión y la destrucción y el cierre forzoso de iglesias, como explicó Puertas Abiertas.

¿Cómo puede Turquía deportarnos porque somos cristianos?

Nos vamos ahora a Turquía, donde los refugiados de otros países, especialmente si son cristianos, son maltratados. Asia News asegura que los refugiados cristianos -algunos de ellos procedentes de Irán-, permanecieron encerrados durante tres meses, hablan de las pésimas condiciones sanitarias en los centros de detención, donde faltan alimentos, agua y medicinas.

Uno de los cristianos detenidos en Antalya, Kamran Topa Ebrahimi, contó: «Me han separado de mi esposa Mona y mis dos hijos». «Llevan a cabo -añade- una guerra psicológica contra nosotros», amenazando con la detención indefinida si no volvemos a nuestro país. La esposa habla de la falta de agua en los centros y del uso de un basurero como medio improvisado para la higiene personal. «¿Cómo puede Turquía -acusa- deportarnos porque somos cristianos?, ¿fingen no saber lo que está pasando? Esta es una guerra psicológica contra nosotros para obligarnos a firmar los formularios de deportación». «Las circunstancias son tan difíciles que preferimos volver a Irán y que nos maten -añade- en vez de quedarnos aquí».

Faranak Reziei, refugiada cristiana de origen kurdo, explica que fue detenida por las autoridades turcas cuando cambió su estado en su perfil de Whatsapp, al terminar los 40 días de luto por la muerte de Mahsa Amini: «No sé quién, pero alguien filtró mi historia a la policía turca y dijo que estoy trabajando con los kurdos turcos [del PKK]», dice Faranak, una madre soltera que estuvo detenida durante 30 días junto con su hija de cuatro años.

Reza Pouti, pastor de la Iranian Freedom Church en Isparta, declaró a Article18 que había conocido personalmente a uno de los cristianos deportados junto con su esposa e hijos antes de que pudiera vender las propiedades en Turquía. «Es una cárcel -denuncia el líder religioso-. No solo en los campos, sino también afuera, la gente vive con miedo» hasta de «abrir la puerta» o «salir a la calle». «De vez en cuando -continúa- trasladan a los solicitantes de asilo a los campos mediante engaños. Yo mismo temo una situación de ese tipo”. Efectivamente, tres semanas después de enviar el mensaje, el propio Reza junto con su esposa Roshanak y su hijo menor Mohammadreza fueron arrestados y enviados a un centro.

Mons. Shao se encuentra en la mira del gobierno y a menudo lo detienen para forzarlo a que se incorpore “a la iglesia ‘oficial’, controlada por el Partido Comunista de China

Y en China, las autoridades comunistas detuvieron al obispo de Wenzhou, Mons. Shao Zhumin, para que no participase en el funeral del P. Chen Nailiang, quien falleció el 29 de enero a los 90 años de edad, informó Asia News.

El P. Chen fue párroco de Pingyang y, al igual que Mons. Shao, perteneció a la Iglesia “clandestina”. El sacerdote fue perseguido por el Partido Comunista Chino (PCCh), que lo encarceló y lo internó varios años en los campos de "reeducación".

La agencia explicó que “Mons. Shao se encuentra en la mira del gobierno y a menudo lo detienen” para forzarlo a que se incorpore “a la iglesia ‘oficial’, controlada por el Partido Comunista de China (PCCh)”.

En ese sentido, indicó que el acuerdo que China y el Vaticano firmaron en 2018 para el nombramiento de obispos -y que fue renovado en 2020 y 2022-, no ha “detenido la represión contra los católicos chinos, sobre todo los no oficiales”.

Hace unos quince días, un cementerio cristiano de Jerusalén fue objeto de actos de vandalismo, se escribieron grafitis con la inscripción “Muerte a los cristianos” en los muros de un monasterio del barrio armenio

Y en Jerusalén, un extremista judío ingresó en la Iglesia de la Flagelación, donde se encuentra la primera estación de la Vía Dolorosa, y derribó la estatua de Jesús y desfiguró su rostro. Tras ser sujetado por el portero del santuario, la policía llegó al lugar y lo detuvo, informan en un comunicado los franciscanos.

Este es el quinto incidente que se produce en las últimas semanas. La semana pasada, unos turistas fueron agredidos por un grupo de judíos religiosos que entraron en la Puerta Nueva. Estos individuos cometieron actos de vandalismo en dicha entrada, cerca de la sede de la Custodia de Tierra Santa, arrojando sillas, mesas y vasos y transformando el barrio cristiano en un campo de batalla.

Hace unos quince días, un cementerio cristiano de Jerusalén fue objeto de actos de vandalismo, se escribieron grafitis con la inscripción “Muerte a los cristianos” en los muros de un monasterio del barrio armenio y se destrozaron locales utilizados como iglesia en el centro maronita de Ma'alot.