Activistas provida irlandeses reciben con preocupación las nuevas restricciones del gobierno irlandés a la oración y presencia ante las clínicas abortistas, que podrían ser las más restrictivas de todo Europa
En Occidente presumimos de disfrutar de una civilización respetuosa con los derechos humanos y con las libertades básicas. Pero eso está cambiando.
España aprobó el pasado mes de abril la ley que modifica el Código Penal y que castiga incluso con penas de cárcel a los provida que vayan a rezar delante de los abortorios.
Pero esto de perseguir a lo provida no solo es un fenómeno español. Se está dando también en países tan desarrollados como Reino Unido, Francia o Alemania. Y a ellos se les va a unir también Irlanda.
Es decir, que en la ‘civilizada’ Europa te sancionan, te coaccionan, por rezar en la calle. ¿A eso se le llama respetar los derechos humanos, como el derecho la libertad religiosa, de reunión y de expresión?
Volviendo a Irlanda, y según cuenta Religión en Libertad, rezar en espacios públicos frente a clínicas abortistas podría ser un hecho reprimido por multas y sanciones, de aprobarse una de las últimas medidas propuestas por el gobierno irlandés.
De aprobarse las nuevas restricciones, alerta Catholic News Agency, será ilegal para peatones y viandantes y motivo de sanción expresar sus convicciones próvida, portar pancartas o publicidad con alternativas próvida al aborto o incluso rezar en silencio dentro en un radio de cien metros de los abortorios.
Las vigilias han sido pacíficas y lícitas. Stephen Donnelly -Ministro de Salud irlandés- lo sabe y está prefiriendo golpear a los provida que él mismo sabe que no vulneran ninguna ley
Megan Ní Sceallláin, representante del Life Institute, destacó el pasado 4 de agosto la ausencia de cualquier evidencia de que la presencia próvida ante los centros fuese intimidante para quienes soliciten los servicios de las clínicas. "Las vigilias han sido pacíficas y lícitas. Stephen Donnelly -Ministro de Salud irlandés- lo sabe y está prefiriendo golpear a los provida que él mismo sabe que no vulneran ninguna ley". Y en caso de que alguna ley fuese violada, añadió, "existen leyes suficientes para abordarlo".
La medida sería una de las más restrictivas de Europa, según declaró a CNA David Quinn, director de la agrupación católica Iona Institute, quien cuestionó que estas fuesen acordes a la Constitución.
"Suponiendo que la ley se apruebe, será una de las más restrictivas de toda Europa porque otros países tienen más respeto por el derecho a protestar y consideran que leyes como esta son desproporcionadas. Ya tenemos leyes en Irlanda contra la intimidación o el acoso. Pero el gobierno sigue presionando, incitado por la mayoría de los partidos de oposición y los grupos de presión a favor del aborto", denunció Quinn.
También subrayó que Irlanda "ha pasado de ser un país extremadamente provida al extremo opuesto en tan solo unos pocos años". Prohibir incluso las vigilias de oración a favor de la vida a menos de 100 metros de lugares que realizan o facilitan el aborto es solo una muestra, añadió.
La destacada abogada y activista provida, Cora Sherlock, alertó del "preocupante precedente" que supone la propuesta de ley y que "debería ser motivo de preocupación independientemente del punto de vista sobre el aborto".
"El derecho a la libertad de expresión, de circulación y de reunión pacífica y la libertad de protesta siempre se han considerado muy importantes en Irlanda y se les ha otorgado una alta prioridad en la Constitución irlandesa. La legislación propuesta que infrinja esto debería hacer sonar las alarmas para todos", concluyó.