
En el mundo okupa cada día encontramos un caso que nos sorprende. Hemos conocido historias que demuestran la caradura y la impunidad con la que actúan: como los okupas que habían convertido la vivienda en un piso turístico y Hacienda multó al propietario o, los okupas que no se iban porque el banco le iba a quitar la casa al propietario, entonces se quedaban hasta que la vivienda fuera del banco. O el okupa que presume con orgullo de no pagar suministro alguno: "lo paga el ayuntamiento"
El programa Vamos a Ver se traslada a Villaviciosa de Odón, en Madrid, para dar voz a Manuela, que denuncia que tiene okupada la casa donde ha vivido toda su vida su familia. Valorada en casi un millón de euros, unos okupas hacen vida allí desde hace un año.
Por su parte, los vecinos han asegurado que tienen miedo, pues parte de los okupas serían violentos y la Policía ha tenido que acudir en más de una ocasión por enfrentamientos entre los propios okupas.
"La Guardia Civil ha venido varias veces, estuvieron vigilando permanentemente durante cuatro días y hemos presenciado varios conflictos. Hasta hace dos años vivíamos aquí y, según nos fuimos, estas personas entraron en la casa. En diciembre hará un año que okupan nuestro hogar", cuenta la hija de Manuela.
"Tenemos varias fotografías en las que se les ve tirando nuestras cosas. La última vez tiraron un sofá azul que era mío. Tenemos fotos de nuestra ropa en los cubos de basura. En el porche tienen un carrito lleno de bolsas de basura que, imagino, contienen todas nuestras cosas. Además de entrar, se permiten vaciar y tirar todo lo que tiene un gran valor sentimental para nosotros".
Hasta aquí podríamos decir que es el día a día en la okupación: un caso injusto, rodeado de violencia okupa y con propietarios y vecinos como escudo social del Gobierno. Pero el programa destaca otro detalle que hace que estalle la indignación: no pueden mostrar las imágenes del chalet porque estarían "violando la privacidad" de los okupas.
"La situación es terrorífica. Antes de hablar con esta familia desesperada, quiero decir que no podemos mostrar imágenes del interior del chalet ni del jardín, donde los okupas han instalado una piscina, porque estaríamos invadiendo la privacidad de los okupas... hasta ahí les protege la ley. Esto me ha dejado pasmada", asegura la presentadora.










