Hispanidad viene denunciando el contexto creciente de la cristianofobia, que muchas veces se manifiesta en el 'martirio de las cosas', es decir, los ataques a símbolos cristianos. Aunque muy relacionada con la cristianofobia se encuentra la cristofobia u odio a Cristo, que también se deja ver en el ataque a los símbolos cristianos.
Es decir, que nos encontramos ante una tendencia, la del aumento de las profanaciones y ataques contra lo cristiano.
En ese contexto, a vuelto a producirse otro ejemplo: en EEUU, en el estado de Kentucky, un joven de 27 años ha reconocido haber decapitado una imagen de la Virgen María y el Niño Jesús, en la iglesia de los Santos Pedro y Pablo, en Hopkinsville. La excusa del individuo fue que los católicos «adoraban» la estatua.
Tras declararse culpable de los hechos -por los que podría ser condenado a 3 años de prisión y una multa de hasta 250.000 dólares-, el fiscal federal Kyle G. Bumgarner declaró en un comunicado: «No podemos ni aceptaremos ataques contra el libre ejercicio de la religión ni la profanación de símbolos religiosos sagrados. El señor Taylor profanó intencionadamente dos de los símbolos más venerados del cristianismo, las estatuas de María y de Jesús, como un ataque a la fe cristiana. Sus motivos y su conducta justifican estos cargos federales. Que esto sirva de advertencia: ningún ataque contra el ejercicio de la religión -sea cual sea la fe- será tolerado en el Distrito Oeste de Kentucky».
Se da la circunstancia de que, tradicionalmente, EEUU siempre ha sido un país muy respetuoso con los símbolos religiosos, incluidos los cristianos. Sin embargo, en los últimos tiempos se está produciendo una escalada de vandalismo y profanaciones contra iglesias católicas y otros templos cristianos.












