La presidenta de la Comunidad Madrileña, Isabel Díaz Ayuso, realiza su ya tradicional discurso (seis minutos, merece la pena escucharlo) en la inauguración del belén navideño
La presidenta de la Comunidad Madrileña, Isabel Díaz Ayuso, realiza su ya tradicional discurso (seis minutos, merece la pena escucharlo) en la inauguración del belén navideño, ubicado en la sede de la Comunidad, en la madrileña Puerta del Sol.
La vida es un regalo que empieza cada día. Seamos nuestra mejor versión.
— Isabel Díaz Ayuso (@IdiazAyuso) November 30, 2023
Volvamos a ser niños para vivir en plenitud la Navidad. pic.twitter.com/3hkbvmiu6X
No descubre Ayuso la pólvora en su discurso, pero decimos que merece la pena porque ver a una política española capaz de hablar de Cristo con la naturalidad que otorga la verdad es algo que, hace 30 años habría parecido normal y habitual, pero hoy representa un descubrimiento brillante. Una 'rara avis' en nuestros días.
"No todas las escenas tradicionales son bonitas y pacíficas, hay una terrible, la matanza de los santos inocentes dirigida por Herodes, esos inocentes, son los niños mas pequeños degollados junto con sus madres que intentaban protegerles", "hoy, como entonces, nos preguntamos el porqué del mal, la respuesta la tenemos en el niño Dios".
"Jesús trae un mensaje de esperanza y de confianza, incluso en medio de los actos más atroces, su mensaje fue revolucionario, un antes y un después en la Historia de la Humanidad: amaos los unos a los otros".
"Nuestras raíces católicas, universales, nos recuerdan que los hombres nacemos, ante todo, libres. Esa es la clave de la civilización cristiana: el hombre es libre hasta para decirle a Dios que no, incluso para el mal más absoluto que supone el terrorismo. Pero ahí se encuentra también nuestra esperanza. Si somos libres para hacer lo peor, también lo somos para hacer lo mejor, para hacer el bien, e incluso ser héroes"
"El humanismo cristiano", que fundamenta "la democracia liberal", sostiene que todos son "responsables los unos de los otros" y por eso hay que protegerse, cuidarse y no "dejar a nadie atrás". Ha advertido que "responsabilidad es libertad" y ha sostenido que "el Niño Dios que nace en Belén" hizo "la promesa de libertad que trae la cultura cristiana, la más profunda de la Historia".
"Una perspectiva cristiana" que hace "ser conscientes de que nada de lo que les ocurra a otros hombres" es "ajeno" y deja la "promesa de la resurrección, de que la muerte no es el final".