Los reclusos extranjeros han superado en número a los españoles en las cárceles de Cataluña. Si a mediados de julio el porcentaje se situaba en el 48% de encarcelados extranjeros, actualmente, son 7.991 los reclusos pertenecientes a ese grupo en Cataluña, de los cuales 3.987 son ciudadanos nacionales (el 49.89%), mientras que 4.004 (el 50.11%) son de origen extranjero, según datos oficiales proporcionados por el Departamento de Justicia de la Generalitat.

Según La Razón, por tipo de delitos, el 62.24% de los presos condenados por hurto son extranjeros, lo que representa 178 de los 286 casos. Asimismo, el 53% de los condenados por robo, el 68% por tráfico de drogas, el 51% de los agresores sexuales y el 52% de los homicidas de mujeres son de origen extranjero. A este respecto, publicamos en Hispanidad que los extranjeros agreden siete veces más a sus mujeres que los españoles... teniendo en cuenta que en España hay un 12,63% de personas de otros países, frente al 87,37% de ciudadanos españoles. A juzgar por las cifras, Cataluña tiene un grave problema con la delincuencia, con la importada y con la adolescente

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Mientras, durante la presentación de la Memoria Anual de la Fiscalía General del Estado, el fiscal general Álvaro García Ortiz, se refería a los menores extranjeros no acompañados para explicar que los menas están 'estigmatizados' bajo esta denominación. Son seres que sufren racismo y xenofobia... y eso que no se meten con nadie. ¿Qué pensarán de este discurso los vecinos del madrileño barrio de Batán a los que los estigmatizados menas han atacado con mataleón? Si el jefe de los fiscales lo ve así, no me extraña que los menores marroquíes, y los que no son tan 'menores', pero dicen que lo son, campen a sus anchas amenazando a la población especialmente a ancianos y mujeres.

Y de nuevo, cuidado con lo que dices, que don Álvaro te amenaza con delito de odio. Es decir, con cuatro años de cárcel.

Por cierto, su defensa, muy sentida, de los menas, coincide con algo que no mereció ningún espacio: resulta que las agresiones sexuales perpetradas por menores se han duplicado en cuatro años: está claro que están estigmatizados por el racismo y la xenofobia. Dí que sí, Álvaro.

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