El sector eléctrico es un clamor contra el Gobierno por las primas -subvenciones- a las energías renovables, especialmente a la solar, la más cara de todas. Hay unanimidad en las tres grandes: Iberdrola, Endesa y Gas Natural-Fenosa: España no es el país más rico del mundo: no puede convertirse en campo de experimentación de energías no probadas, especialmente la solar. Sobre todo, cuando el parque nuclear proporciona energía mucho más barata y cuando todos los países, también los Estados Unidos de Barack Obama, han ampliado la vida de sus centrales nucleares de 40 a 60, años mientras llega el nuevo ciclo.
Iberdrola (líder en renovables, pero que no ha querido entrar en solar, al considerarla un producto financiero), mientras la nueva Fenosa, gasera y carbonera, brama contra un déficit de tarifa hinchado por mor de las primas a las renovables especialmente la fotovoltaica y la solar.
Por cierto, las eléctricas también denuncian la trampa de la termosolar, por ejemplo, de las que construyen ACS y Abengoa, adosadas a una central térmica de gas, pero con una remuneración de solar, esto es, cuatro veces más elevada.
Pero es igual, la tozudez de Zapatero, apoyado por ACS, Abengoa y Acciona (la llamada Triple A), además de Isolux, principal productor de energía fotovoltaica del país, nos han llevado a la situación actual. Si se observa el gráfico adjunto, elaborado por el sector, la energía nuclear, contando el coste de la gestión de residuos, sale por 11 euros el MW/h de coste, frente a los 285 de la energía fotovoltaica, a pesar de las reducciones conseguidas con la mejora de materiales y del aprovechamientote las nuevas placas y de las horas de sol. Para que se hagan una idea, el contaminante carbón nacional produce electricidad a 58 euros por 42 el carbón de importación. Junto a ello, tenemos los 43 euros por MW/h de la eólica y los 90 de la marina. ¿Por que Florentino Pérez, José Manuel Entrecanales, Felipe Benjumea o Luis Delso invierten en un negocio desastroso? Por las subvenciones públicas.
Nadie entiende la cabezonería de Rodríguez Zapatero, pero, en cualquier caso, su palabra es ley. El único ministro nuclear del Gobierno ha presentado su rendición. El titular de Industria, Miguel Sebastián ha renunciado a cualquier lucha por la central nuclear de Garoña. Sebastián ya sólo aspira a ser el último vicepresidente económico del Gobierno Zapatero, aún a sabiendas de que política e ideológicamente, está anulado.
Eulogio López
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