Eduardo Bendala estuvo en Cedro, la mayor intermediaria de derechos de autor, y dirigió el ataque de los grandes editores contra los clipineros, las empresas de resúmenes de prensa. Siempre fue un enamorado de los derechos de autor de los señores de la prensa y su objetivo consistió en cerrar las pequeñas empresas de resúmenes de prensa. No lo consiguió pero le dio buenos sustos a más de una. Una batalla que se plantearon los grandes rotativos cuando empezaban a caer las ventas por la irrupción de Internet. Más adelante, esa pantalla se reveló inútil, porque Internet se comió a la prensa papel, así que los clipineros se convirtieron en la menor de las preocupaciones de los grandes multimedia. Ahora, el problema es Google, que no es una pequeña empresa.
Bendala, desde el diario El Mundo, promovió toda una campaña, que englobaba seminarios donde se llegaba a invitar a jueces -uno de los emolumentos extras con los que cuentan sus señorías son los congresos y seminarios- que intervenían en los procesos judiciales que afectaban a las miniempresas de documentación de prensa escrita.
Pues bien, Bendala, hoy en el Grupo Santander, fue impulsor y hasta vicepresidente de Gowex, la obra de Jenaro García, hoy en los tribunales.
Miriam Prat
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