El portavoz de ERC, Gabriel Rufián, fue expulsado ayer del pleno del Congreso por la presidenta de la Cámara Baja, Ana Pastor, tras ser llamado al orden al protagonizar un duro rifirrafe con el ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell. Rufián, además de referirse a la bancada de Ciudadanos como "fascistas", por una intervención anterior, acusó a Borrell de ser "el ministro más indigno de la democracia". Los otros miembros de ERC salieron con él y al pasar por delante del ministro uno de ellos hizo un gesto que el titular de Exteriores interpretó como un escupitajo. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se solidarizó con Borrell por haber tenido que "soportar palabras y gestos inaceptables", al tiempo que pidió a los diputados que reflexionen para evitar socavar la dignidad del Congreso y la democracia.

Y el proyecto de Presupuestos del Gobierno de Pedro Sánchez genera dudas en los organismos internacionales, que advierten del aumento del déficit en un entorno de moderación del crecimiento. La Comisión Europea considera que las medidas que contiene el plan presupuestario implican un "riesgo de incumplimiento" del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, ya que se desvía de los objetivos de déficit y deuda, por lo que reclama al Gobierno "medidas necesarias" para corregir esos desvíos. Por su parte, el FMI empeoró su previsión para España y pidió medidas fiscales creíbles. La OCDE también bajó la previsión del PIB y alertó del fin de la expansión mundial.