Perú es el tercer país más grande de América del Sur y tiene un gran potencial
En esta época estival, donde los viajes se empiezan a multiplicar, con permiso de la pandemia del coronavirus, ponemos los ojos en Hispanoamérica. Pero no en los países que baña el océano Atlántico (Venezuela, Guyana, Surinam, Guayana Francesa, Brasil, Uruguay y Argentina), sino en uno que da al océano Pacífico: Perú. No es un país cualquiera, sino que tiene abundantes recursos naturales y un gran potencial de futuro, si logra superar las últimas crisis que afronta: la política, la sanitaria provocada por el Covid-19 y la económica.
Sus orígenes se remontan al undécimo milenio antes de Cristo (a. C.), en el que están datados sus restos arqueológicos más antiguos. Los primeros pobladores se reunían en tribus y aldeas, en el cuarto milenio a. C. iniciaron una jerarquización, y en el siguiente milenio, en el complejo de Caral, surgió la civilización más antigua del continente que adoptó el nombre del lugar. A esta le siguieron otras muchas, entre ellas, una de las más destacadas fue la que dio lugar al Imperio inca, el cual dominó gran parte del occidente sudamericano en el siglo XV. Pero en 1532 sucumbió ante la conquista española de Francisco Pizarro, creando el segundo virreinato más poderoso que nuestro país tuvo en ultramar. El dominio español del país duró hasta el 28 de julio de 1821, cuando el líder de la Expedición Libertadora del Perú, el general argentino José San Martín, proclamó la independencia, dando lugar a la República Peruana.
Sus orígenes se remontan al undécimo milenio antes de Cristo (a. C.) y entre sus muchas civilizaciones destaca el Imperio inca, que sucumbió ante la conquista española de Francisco Pizarro. El país proclamó su independencia el 28 de julio de 1821
Poco más de una década después, se dio la guerra entre Salaverry y Santa Cruz, el antecedente para crear la Confederación Perú-Boliviana (1836-1839). Más tarde, hubo más batallas y guerras civiles, con periodos de paz, como en el primer mandato de Ramón Castilla y en gran parte del segundo, cuando empezó la modernización del país con obras públicas y la llegada de migrantes europeos; o con Nicolás de Piérola. En el siglo XX se sucedieron gobiernos militares, movimientos populares, algunos presidentes democráticos, enfrentamientos con Ecuador e inestabilidad política, a los que en la década de 1980 se sumó una fuerte crisis económica y social, y un conflicto armado interno por los grupos terroristas Sendero Luminoso y el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru. En 1990, Alberto Fujimori llegó a presidente y encadenó tres mandatos, pero salió por una crisis política tras un escándalo de sobornos y años más tarde fue condenado por varios delitos. Así, empezó la sombra de la corrupción que ha manchado a otros presidentes (entre ellos, Alejandro Toledo, Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski), y que junto a la debilidad parlamentaria ha provocado que haya habido cuatro presidentes distintos en los últimos cinco años: Francisco Rafael Sagasti es el actual y próximamente dará el relevo.
Este año, el país ha celebrado elecciones: en la primera vuelta salieron vencedores el candidato ultra izquierdista Pedro Castillo y la derechista Keiko Fujimori, y en la segunda, ha ganado Castillo por unos 44.000 votos. Tras esto, ha habido manifestaciones, acusaciones de fraude electoral y distintas impugnaciones (la mayoría han sido rechazadas), y Keiko ha pedido que se anulen unos 200.000 votos. Por todo ello, los peruanos aún no saben quién los gobernará a partir del próximo 28 de julio, fecha prevista para el cambio de mando y en la que además se conmemora el bicentenario de la independencia, aunque desde el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), que ya ha revisado los cerca de 300 expedientes, se trabajará para que la proclamación sea la próxima semana.
En las elecciones ha ganado Pedro Castillo a Keiko Fujimori, pero ha habido acusaciones de fraude electoral e impugnaciones. Los peruanos aún no saben quién los gobernará, aunque la proclamación podría ser la próxima semana
A la crisis política y la fuerte polarización se suma la crisis sanitaria debido al fuerte impacto del Covid-19, que ya ha causado más de 194.600 muertos en Perú. De esta forma, es el quinto país del mundo con la cifra total de fallecidos más alta, tras EEUU, Brasil, India y México, pero ojo, porque es el que tiene la tasa de mortalidad más elevada por millón de habitantes: 5.982 muertos por cada millón de habitantes. Además, no hay que perder de vista una nueva variante del Covid-19 denominada Lambda, que se ha detectado por primera vez en Perú y que ya es considerada como “variante de interés” por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Y a la crisis política y sanitaria, se une la económica en un país que tiene un gran potencial: con una superficie de 1,28 kilómetros cuadrados es el tercer país más grande de América del Sur, su población es de unos 33 millones de personas, y tiene una gran diversidad biológica y geográfica (costa, montaña y selva). Asimismo, es un país rico en recursos naturales, destacando los recursos mineros, donde ostenta el liderazgo hispanoamericano: junto a Chile tiene las principales reservas de cobre, algo muy positivo teniendo en cuenta el auge de las energías renovables y de los motores eléctricos que hay en todo el mundo; es el tercer productor mundial de plata, cobre y zinc; es el quinto productor de oro; y también tiene yacimientos de hierro, estaño y manganeso, así como de gas natural y petróleo.
Es el primer productor mundial de lana de alpaca y el más importante exportador de prendas textiles de algodón de Hispanoamérica
Entre 2001 y 2016, la economía crecía de media anual un 5% y redujo la pobreza del 60% al 21%, con pensiones, programas de apoyo alimentario y políticas de inversión pública, pero no se invirtió fuertemente en desarrollar nuevos sectores que elevarán el PIB, se disparó el microemprendimiento y las microempresas, cuatro de cada diez trabajadores están autoempleados. Asimismo, el aparato burocrático aún es insuficiente y también hay corrupción, aspectos que también lastran el avance económico. El eslogan del comunista Pedro Castillo, el ganador de las elecciones, era “No más pobres en un país tan rico”, pues el 30% de la población no llega a 100 dólares (unos 84 euros) al mes y la pandemia no está siendo de ayuda porque ha reducido los ingresos.
Perú también presenta riqueza en recursos marinos y es el primer productor mundial de harina de pescado. Asimismo, cuenta con una destacada agricultura: espárragos, alcachofa, café, maíz, arroz, patata, arroz, trigo, quinoa, manzana, pera, uva, plátano, cebolla, tomate, ajo, cacao, etc. Es el primer productor mundial de lana de alpaca, el más importante exportador de prendas textiles de algodón de Hispanoamérica y su riqueza natural le sitúa en una excelente posición para desarrollar la industria de polímeros (entre los más usados están el polietileno, el polipropileno, el poliestireno o el nylon). Y una de las actividades económicas con gran potencial es la explotación de recursos forestales (cedro, roble y caoba, principalmente), esperando que la deforestación sea controlada y haya grandes inversiones en reforestación, pues la selva supone el 60% de la superficie del país. En su desarrollo industrial, destaca la producción de carrocerías para autobuses de dos pisos, máquinas para minería, equipos de bombeo (por la energía hidráulica) y una gran variedad de productos (químicos, plásticos, textiles, papeleros, de cuero, agroindustriales y alimenticios. Y el turismo constituye la tercera industria del país, tras la pesca y la minería, contribuyendo a la hostelería y al transporte, donde cuenta con bastantes ventajas, como: 140.000 kilómetros de carreteras, un gran desarrollo del sector aéreo con aeropuertos en las 21 ciudades más importantes y aerodromos en poblaciones alejadas, y tiene bastantes puertos, aunque el ferrocarril está bastante limitado y muy vinculado a la minería.
Una de las actividades económicas con gran potencial es la explotación de recursos forestales y el turismo constituye la tercera industria del país, tras la pesca y la minería
Perú debe ser un país a tener cada vez más en cuenta en el presente y en el futuro, y no es ajeno al comercio electrónico, que ha recibido un fuerte impulso con la pandemia del coronavirus y vive un gran crecimiento en Hispanoamérica, donde las ventas digitales minoristas subirán un 36,7% este año, según la consultora eMarketer, lo que supondría alcanzar una cifra de unos 84.900 millones de dólares (unos 71.900 millones de euros). Un estudio de eCommerce realizado por Linio, que elabora un Índice Mundial de Comercio Electrónico, sitúa a Brasil, México, Chile, Argentina, Colombia y Perú como los países con mayores ingresos en ventas electrónicas de dicha zona del mundo.
Contenido patrocinado por: Inditex