Mucho se ha hablado, y se habla, del papel que deben asumir las empresas privadas en la formación de los universitarios para impulsar la investigación y la innovación en el mundo académico.

Se trata de una implicación crucial según los expertos porque estamos ante una manera de contribuir al desarrollo profesional de los más jóvenes en un mundo cada vez más globalizado, sin fronteras, que potencia el trabajo en equipo independientemente de donde se encuentren cada uno de sus componentes.

Además, y como es ya una tradición, la Universidad pone a disposición del alumnado becas para cursar sus estudios en el extranjero, iniciativas que cuentan en muchos casos con el apoyo de las empresas privadas para formar a los futuros profesionales en su sector.

En sentido, la empresa que colabora con la Universidad busca estar lo más cerca posible del talento joven, lo que abre la posibilidad de incorporar a aquellos estudiantes que destaquen o se adapten mejor a su proyecto empresarial lo que implica que, formarse, es mucho más de lo que se aprende en un aula.

Y es que formarse es mucho más que hacerlo en el aula. De las colaboraciones entre empresas y universidades han nacido proyectos que han destacado por su buen hacer, por su aportación al conocimiento y al desarrollo de ideas innovadoras.  

La Red fue reconocida en 2018 con el premio Excellentia Ex Cathedra, otorgado por la Universidad de Valencia

Por ejemplo, el que impulsa la Fundación Abertis, iniciativa ya veterana que este año celebra su décimo octavo aniversario y que fue el primer think tank, es decir, el primer laboratorio de ideas global entre universidad y empresa del sector que se puso a funcionar en España.

Hablamos de la Red Internacional de Cátedras Abertis sobre la Gestión de Infraestructuras de Transporte y Seguridad Vial que promueve la formación y la investigación.

“Sus objetivos”, según explica la Fundación, “son fomentar el desarrollo y la innovación en la planificación y las operaciones de transporte; analizar los costes de inversión, mantenimiento y gestión de las infraestructuras de transporte; analizar la demanda de transporte y su comportamiento; el negocio de las concesiones; analizar la política tarifaria y de precios; la aplicación de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) al transporte y otros aspectos científicos, sociales, culturales, económicos, tecnológicos y de comunicación del transporte”.

La Red está formada por la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC) y la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), en España; la École des Ponts (ENPC) ParisTech, en Francia; la Universidad de Puerto Rico, en Puerto Rico; la Pontificia Universidad Católica de Chile, en Chile; y la Universidad de São Paulo, en Brasil. 

Cada uno de los países promueve el Premio Abertis de investigación con tres modalidades: tesis doctoral, trabajo de investigación especializado en seguridad vial y tesina o trabajo de final de máster. Su dotación es de 8.000 euros en la primera categoría y de 3.000 en las otras dos. 

Premios

Los ganadores nacionales de cada modalidad compiten en el Premio Internacional Abertis.

En Francia, el premio de la Cátedra Abertis-Sanef-École des Ponts recayó en Malalatiana Randriamasy, en la categoría de Gestión de infraestructuras de transporte, por una tesis sobre la comunicación vehículo-infraestructura y su aplicación sobre el telepeaje. En la categoría Seguridad Vial, el premiado fue Yann Meneroux, por una tesis sobre métodos de detección de la señalización vial.

En Brasil el Premio de la Cátedra Abertis-Universidad de São Paulo en la categoría Infraestructuras de transporte lo recibió Willian Fedrigo y en la categoría Seguridad vial, Aurenice da Cruz Figueira.

Entre 2003 y 2020, 750 candidatos, procedentes de todos los países, se han presentado a las diferentes ediciones. El 35%, mujeres y el 65%, hombres.

Tres son las modalidades que optan al Premio Abertis de investigación: tesis doctoral, trabajo de investigación especializado en seguridad vial y tesina o trabajo de final de máster

Veintisiete candidaturas presentadas para la XVII edición

Los problemas derivados de la crisis sanitaria provocada por la pandemia han hecho que los premios de la XVII edición, aquí en España, correspondientes al año 2019 y fallados por el jurado en 2020, estén pendientes de la ceremonia de entrega.

Fueron veintisiete candidaturas presentadas, (veinte en la modalidad de transporte y seis en la modalidad de Seguridad Vial).

El premio en la modalidad de Gestión del Transporte recayó en el Marcel Sala (Universidad Politécnica de Barcelona) por una tesis sobre estrategias de gestión de autopistas presentes y futuras.

El finalista fue Álvaro Rodríguez (Universidad Politécnica de Madrid) cuya tesis desarrolla la optimización del rendimiento en el aeropuerto: operaciones de razonamiento probabilístico y técnicas de aprendizaje por refuerzo.

Por su parte, en la modalidad de Seguridad Vial, la tesis premiada fue la de Jesús Balado, (Universidad de Vigo) sobre la modelización de entornos urbanos; diagnóstico de accesibilidad física y localización de peatones.

La Accésit recayó en la tesis elaborada por Silvia Sipone (Universidad de Burgos), sobre el fomento de la movilidad sostenible en educación primaria a través de la gamificación

La Red fue reconocida en 2018 con el premio Excellentia Ex Cathedra, otorgado por la Universidad de Valencia, en la categoría de ‘Buenas prácticas en la dirección y gestión de los recursos de las cátedras para el desarrollo de sus actividades’.