China inició el jueves sus más importantes maniobras militares en décadas alrededor de Taiwán, tras la visita a la isla de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, recoge Swissinfo.

perspectiva de género

Pelosi abandonó Taiwán el miércoles al concluir una visita de menos de 24 horas que enfureció a Pekín, que considera a la isla parte de su territorio.

La legisladora, segunda en la línea de sucesión presidencial, es la jerarca estadounidense de más alto perfil en visitar Taiwán en 25 años. Pelosi aseguró que su presencia fue para "dejar claro, de forma inequívoca", que Estados Unidos "no abandonará" a Taiwán, añade Swissinfo.

Mientras que Pekín defendió los ejercicios, así como otras maniobras realizadas los últimos días, como "justos y necesarios" y culpó a Estados Unidos y sus aliados de la escalada. "En la actual lucha por la visita de Pelosi a Taiwán, Estados Unidos es el provocador y China la víctima", declaró la portavoz del ministerio chino de Relaciones Exteriores, Hua Chunying.

Por su parte, el jefe de la Misión China ante la Unión Europea, Zhang Ming, ha contestado este jueves al comunicado compartido el miércoles por los ministros de Exteriores del G7 y de la Unión advirtiendo de que responderá ante cualquier violación de su soberanía: "Taiwán forma parte del territorio chino y entrometerse en sus asuntos es una violación de la soberanía de China".

Taipéi afirmó que monitorea de cerca los ejercicios y que sus fuerzas se preparan para un conflicto, pero que no lo busca. "El ministerio de Defensa Nacional sostiene que mantendrá el principio de prepararse para la guerra sin buscar la guerra, con la actitud de no escalar el conflicto ni causar disputas", dijo la dependencia taiwanesa, explica Swissinfo.

Los 23 millones de habitantes de Taiwán viven con la posibilidad de una invasión. La amenaza se ha intensificado bajo el presidente chino Xi Jinping.

El estrecho de Taiwán, de 130 km de ancho en su punto más angosto, es una importante ruta naviera internacional.

vietcong

Sin embargo, analistas han dicho a AFP que China no busca escalar la situación más allá de su control, al menos por ahora. "Lo último que quiere Xi es que estalle una guerra accidental", afirmó Titus Chen, profesor asociado de Ciencias Políticas en la Universidad Nacional Sun Yat-Sen de Taiwán, recoge Swissinfo.