Era lo esperado: la ministra de Exteriores, Liz Truss, será nombrada el martes primera ministra de Reino Unido tras ganar en las primarias a su colega de partido, de origen indio, y exministro de Economía, Rishi Sunak, por 81.326 votos frente a 60.399, esto es, el 57,4% de los apoyos, inferior al que obtuvieron en su día Johnson o Cameron.

En su primera intervención, la nueva líder ‘torie’ no ha tenido reparos en resaltar los logros de su “amigo” Boris, como el Brexit, la campaña de vacunación contra el Covid y su oposición a Putin.

“He hecho campaña como conservadora y gobernaré como conservadora”, ha afirmado Truss, que en los próximos días concretará la bajada de impuestos prometida y las medidas para hacer frente a la crisis energética.

Más allá de la economía, Truss aún tiene pendiente prohibir los bloqueadores hormonales para el cambio de sexo en menores, tal y como prometió en 2020. La ocasión no puede ser mejor, tras el reciente caso -mes de agosto- de la clínica Tavistock, como publicamos en Hispanidad.