Contábamos ayer en Hispanidad, que neocomunismo invade Occidente: el exguerrillero Gustavo Petro será el próximo presidente de Colombia. Las reacciones de líderes comunistas con fuerte representación del Foro de Sao Paulo y del Grupo de Puebla no se hacían esperar. Entre el elenco podíamos encontrar al dictador venezolano, Nicolás Maduro; al expresidente de Bolivia, Evo Morales; al expresidente de Brasil, Lula da Silva; al expresidente de Ecuador, Rafael Correa; y al cubano, Miguel Díaz-Canel. 

Y este martes asistimos a las felicitaciones del presidente socalista de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), y del marxista posmoderno chileno, Gabriel Boric. AMLO se ha mostrado muy feliz y complacido.

Por su lado, Boric no dudó en mostrar su alegría, y su estrecha relación con el exguerrillero y ahora presidente colombiano, Petro. 

Pero ha sido el gobernador del estado de Florida (EEUU), Ron DeSantis, quien ha advertido del grave peligro de la victoria de Petro en Colombia, y ha hecho hincapié en los momentos complicados por los que pasan quienes luchan contra el "totalitarismo y el marxismo": 

“Solo quiero decir al pueblo de la Florida, que vimos los resultados de la elección en Colombia y tenemos un gran número de colombo-americanos aquí en nuestro estado que estaban muy preocupados por lo que ocurriría allí. Y pienso que los resultados de esa elección son bastante problemáticos para las personas que creen en la libertad en el Hemisferio Occidental”,

Y recuerda, al igual que el Foro de Madrid, el pasado del nuevo presidente de Colombia: “Elegir a alguien señalado por haber sido narcoterrorista y de paso ser marxista para liderar Colombia va a ser desastroso. Nosotros apoyamos a las personas que desde acá desde la Florida tienen lazos con Colombia. Nosotros tenemos una gran relación con Colombia como Estado. Esperábamos un resultado distinto, pero tenemos un problema en el Hemisferio Occidental con la expansión del totalitarismo y el marxismo. Pensamos en la guerra fría, hace 25 años atrás, pero esto sigue asomando su cabeza”.

El neocomunismo invade Colombia, y todo Occidente.