Empezamos esta crónica semanal de Hispanoamérica  —en la que hacemos especial énfasis en la defensa de la vida, la familia natural, la libertad de enseñanza y el bien común, es decir, los principios no negociables establecidos por Benedicto XVI— en Colombia, para defender el principio no negociable del derecho a la vida. 

En declaraciones a el diario El Tiempo, el arzobispo de Bogotá, el cardenal Luis José Rueda Aparicio, declaró que “no habrá paz total en Colombia y en ningún país” de Hispanoamérica “mientras haya narcotráfico”. 

Para el cardenal, la droga y su comercialización por medio de estructuras que trafican con estas sustancias son causa de muchos conflictos y males para los países que la sufren: “Es la fuente de todos los problemas sociales de nuestro país”. 

Por esa razón, este problema —afirma el también arzobispo de Bogotá— “tiene que ser abordado desde distintos aspectos, no solamente desde el diálogo, sino desde lo jurídico, desde lo económico, desde lo político. Si no asumimos el tema del narcotráfico en la búsqueda de la paz, no tendremos paz, porque el narcotráfico es el combustible de la guerra y de la violencia y de la muerte”. 

El crimen organizado mantiene a los pueblos sitiados, secuestrados, intimidados y amenazados...

En México, una preocupación muy similar a la de los obispos hondureños expresó el obispo de San Cristóbal de las Casas, Mons. Rodrigo Aguilar Martínez (estado mexicano de Chiapas), contra la violencia que genera el narcotráfico y el crimen organizado. 

En concreto, estas fueron parte de sus palabras expresadas en una carta: “El crimen organizado mantiene a los pueblos sitiados, secuestrados, intimidados y amenazados; vulnerándolos cada día más”, bajo “amenazas, hostigamientos, cobro de piso, intimidaciones, desapariciones, secuestros, asesinatos, despojos de bienes materiales, retenes, cobro de paso, el saqueo y explotación minera ilegal”. En su carta, Mons. Rodrigo Aguilar también denunció la connivencia de funcionarios e instituciones corruptas, que reciben compensaciones económicas a cambio de hacer la vista gorda ante semejantes injusticias. 

Mons. Rodrigo Aguilar Martínez, Obispo de San Cristóbal de las Casas

(Mons. Rodrigo Aguilar)

Nos vamos ahora a Costa Rica, donde una asociación católica, de nombre ‘Asociación Obras del Espíritu Santo’, ha llevado a cabo una interesante iniciativa navideña, consistente en repartir alimentos y juguetes a unos 35.000 niños en riesgo de pobreza. La iniciativa lleva por nombre ‘¡Jesús: a tus niños los cuida tu Iglesia’. 

Esta Asociación cuenta con 22 años de antigüedad en Costa Rica y se dedica a apoyar a localidades del país especialmente vulnerables o que sufren el azote del hambre y la pobreza. De hecho, cada año atiende a unas 200.000 personas, de las cuales tres cuartas partes son niños. Por esa razón, ha sido reconocida como “de utilidad pública” por las autoridades del país centroamericano.