Rueda de prensa fin de año, de Pedro Sánchez en el Palacio de la Moncloa. Comienza pidiendo paciencia a los periodistas si se alarga en el discurso: a continuación se tira una hora hablando. A las preguntas, objetivo central de una conferencia de prensa, no les dedica ni la mitad de ese tiempo y, naturalmente, no responde a ninguna.

Le encanta hablar pero nunca mira a los ojos. Le encanta decir la verdad pero no completarla. Últimamente ya sólo lee y como en un show americano comienza hablar con el asunto más candente, que no el más importante; las acusaciones de acoso sexual generalizado en el PSOE, precisamente ellos los feministos: "Les digo a los ciudadanos y sobre todo a las ciudadanas que el compromiso del Gobierno y del PSOE con el feminismo es absoluto". 

Luego, ya de propina, "aboliremos la prostitución" aunque no tenga apoyo parlamentario. Es igual, lo de Sánchez es el relato. Mientras pueda apuntarse un tanto, la promesa se convierte en hecho, independientemente de quién lo consiga.

60 euros al mes para viajar gratis por toda España... pues como no pongan su parte las autonomías. Es igual: Sánchez ya ha vendido su relato

Total, que el yerno del proxeneta quiere abolir la prostitución. Hasta ahora no ha podido por falta de votos y aunque nosotros apoyemos la abolición de la prostitución lo que no se puede mantener es la hipocresía de que la prostitución es la explotación de la mujer por el hombre cuando muchas prostitutas ejercen su 'oficio' porque les viene en gana. ¿La prostitución es machista pero no inmoral? Entonces, a lo mejor es que el machismo no es inmoral. 

De todas formas, el cinismo del personaje no tiene límites. Insisto: el yerno del proxeneta quiere abolir la prostitución. 

Sánchez es el gran embustero. La renta disponible de los hogares subió un 10% desde 2018. Sí, pero el IPC lo hizo en un 22,8%. Ergo, Sánchez nos empobrece.

Lo primero: el acoso sexual nos preocupa mucho porque somos feministas. Lo segundo: y tú más. Lo cierto es que ni el acoso sexual ni el feminismo le importan un pimiento, salvo como materia prima para mantenerse en el cargo

La estrella de la rueda de prensa presidencial: 60 euros al mes para viajar gratis por toda España... pues como no pongan de su parte las autonomías. Es igual: Sánchez ya ha vendido su relato. El resto no importa.

El acoso sexual por lo que podría caer su Gobierno: nos preocupa mucho porque somos feministas. Lo segundo: y tú más. Lo cierto es que ni el acoso sexual ni el feminismo le importan un pimiento, salvo como materia prima para mantenerse en el cargo. Porque él es un feminista de mucho cuidado. 

En el entretanto, continúa la obsesión de Sánchez contra Isabel Ayuso: es superior a sus fuerzas. Un tic enfermizo, porque su discurso siempre termina en la presidenta de la Comunidad de Madrid.

¿Y en vivienda, donde el fracaso no se puede ocultar? Es por la culpa es de las autonomías... pero nos preocupa mucho, que conste. ¿Y las listas de espera en la sanidad pública? Lo mismo: la culpa es de la autonomías.

Continúa la obsesión de Sánchez contra Isabel Ayuso: es superior a sus fuerzas

Decreto ley para cerrar un abono único de transportes en todos 60 euros por mes y 30 euros para jóvenes menores de 26 años. Cuando entre en vigor, todos los españoles podrán viajar por todo el país en cualquier medio de transportes. Que se vayan adhiriendo toda las redes de transportes locales. Veremos en qué términos, porque la mayoría de los transportes son autonómicos o son de alta velocidad o aviones. Vamos, que no dependen de autobús, trenes de cercanías y de media distancia.  

La lucha contra el cambio climático no es una cuestión ideológica es una cuestión de supervivencia. El problema es cómo lo va a arreglar. 

¿Y en vivienda, donde el fracaso no se puede ocultar? Es que la culpa es de las autonomías... pero nos preocupa mucho, que conste. ¿Y las listas de espera en la sanidad pública? Lo mismo: la culpa es de las autonomías

Oiga y el 60% de la energía es renovable. O sea, más barata: mentira. La energía hay que tener la cuando se necesita, no cuando se genera.

Pero tiene olfato; la sostenibilidad es algo pasado de moda pero nosotros no nos vamos a desviar de nuestro compromiso con el planeta.

Cataluña vivió una tragedia azuzada por un Gobierno que todo lo convertía en conflictivo. Pero chico, si tú aprobaste el 155.