Hispanidad viene informando de las 'misteriosas' relaciones del expresidente español socialista José Luis Rodríguez Zapatero con el chavismo.

De hecho, el expresidente español está en el punto de mira de EEUU, debido a sus vinculaciones con el narcoestado de Venezuela y con la china Huawei, una empresa vetada en EEUU y muy vigilada desde Bruselas, como ha venido recogiendo también Hispanidad.

Y es que, del futuro de ZP dependen el narcoestado venezolano, Telefónica… y el PSOE. Haber roto con Huawei -se lo ha prometido a Sánchez, como adelantó Hispanidad- no significa que el poder de ZP haya menguado en la teleco que preside Marc Murtra. Por el contrario, su presencia en la sombra sigue tan activa como antes, con Emilio Gayo, CEO de la compañía, y Javier de Paz, presidente de Movistar+, como publicó también Hispanidad. 

Pero, como decimos, ademas de la variable venezolana, hay otra en los negocios de Zapatero y es su conexión con la dictadura comunista china.

Este fin de semana El Mundo ha publicado lo que les ha dicho una de sus fuentes: «Zapatero abrió camino y luego han estado llegando a China otras viejas glorias del PSOE para hacer negocios».

Entre esas viejas glorias, el el exministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, que también ha hecho de intermediario para algunas compañías chinas que han invertido en nuestro país. 

Este medio también destaca la influencia de la consultora Acento, dirigida por el exministro José Blanco, y el actual secretario de Estado de Telecomunicaciones, Antonio Hernando. Dicha consultora se registró como lobby en Bruselas en 2020  para trabajar para Huawei, la empresa china para la que Zapatero hizo de intermediario en sus  negociaciones de 2019 con Telefónica sobre la red 5-G de la empresa de telecomunicaciones china. 

Otra fuente explica a El Mundo: «Zapatero ejerce de lobista pro China a la vez que se viste de representante comercial y de embajador de Sánchez». «Y lo peor es que nadie en Madrid explica cuál es su papel exacto en las relaciones entre España y China, ni cuánto dinero se lleva por todo esto».