Recientemente en Hispanidad nos hacíamos eco de la decisión de Montero de colocar en Igualdad como asesores a una condenada y dos imputados pendientes de juicio por malversación. Los nuevos asesores en el Ministerio de Irene Isa Serra, Carlos Sánchez Mato y Celia Mayer, todos ellos dirigentes o cargos afines a Podemos e Izquierda Unida que perdieron en los últimos tiempos sus actas en la Asamblea de Madrid o el Ayuntamiento de Madrid por sus diversos problemas con la Justicia.

En el caso de Serra, recordemos que fue condenada a un año y siete meses de prisión por atentado a la autoridad cuando intentó frenar un desahucio hace siete años, en Madrid, el 31 de enero de 2014.

Por su parte, Mato y Mayer están investigados por un presunto delito de malversación y prevaricación en el llamado caso Open de Tenis, cuando encargaron a dedo y sin concurso público a dos bufetes de abogados para que analizaran el convenio firmado entre el Consistorio y la empresa organizadora del Masters de Madrid. Se les pagó fraccionando los pagos para evadir los controles del Ayuntamiento. Ambos están pendientes de la celebración del juicio.

Tras su nombramiento, Montero apuntó a que los problemas judiciales de sus nuevos asesores se debían a que están "perseguidos" por "defender la democracia".

Y ahora, da un paso más en su defensa destacando que son personas "íntegras" y "buenas". Así le ha respondido al senador de Ciudadanos, Miguel Sánchez López cuando este le ha preguntado por los criterios que ha seguido el Ministerio de Igualdad para contratar a una persona condenada por atacar una mujer policía.

En su réplica, Montero ha contraatacado: "Si usted no sabe distinguir entre un corrupto y quienes persiguen la corrupción y si no es capaz de distinguir entre un corrupto y una defensora de los derechos humanos, igual es que el el problema lo tiene usted y su partido no es Ciudadanos sino el PP".