La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) y CCOO han acordado el inicio de una nueva campaña de movilizaciones en la Seguridad Social para denunciar la falta de efectivos, el retraso en la gestión de las prestaciones y el incumplimiento general de los acuerdos de personal y que culminarán con la primera huelga en la historia de este organismo, informa CSIF. 

Dolores Panero, portavoz de CCOO de la Seguridad Social, ha apuntado: "Es una situación límite después de haber mantenido reuniones con el Ministerio para intentar llegar a un acuerdo". E incide también en que desde sindicato quieren conseguir "un plan de medidas que adquiera compromiso, que afecten al personal y que inciden en el servicio de calidad para el conjunto de la ciudadanía". Para estos planes propone que sean, al menos "de intensificación o de ordenación", considerando esto como "lo ideal" para acabar con el conflicto y evitar "males mayores" dada la situación.

Los representantes sindicales han asegurado que el documento del Ministerio "no les ofrecía garantías suficientes", por lo que han reclamado un "compromiso real", y han añadido que este posible acuerdo les llegó "más tarde de lo habitual" y necesitan tiempo para presentar alegaciones y asegurarse de que algunas de las medidas propuestas se pongan en marcha de forma inmediata.

A la falta de personal, según denuncian los sindicatos, se une que el nuevo modelo de trabajo "está impidiendo (a los trabajadores) tramitar los expedientes en la medida que les gustaría", lo que provoca "desorganización" en la Seguridad Social.

Al descontento de los funcionarios de la Seguridad Social se une el de los funcionarios del sector de la justicia, incluidos jueces y fiscales, que también han planteado huelgas. 

Además, también están cabreados los inspectores de trabajo, por las "insoportables" jornadas laborales que padecen y ante las que han convocado una huelga.  

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