Un extraño regocijo reina en toda España. Lo reflejan los memes y se comenta en la calles. Así que cuando uno oye hablar a Gabriel Rufián, Íñigo 'Errecoz' o Ione Belarra de lo preocupados que viven los españoles por el hecho de que los móviles del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y de la ministra de Defensa, Margarita Robles, han sido hackeados, pues hombre, como que me sorprende.

Sánchez hackeado: la situación es grave pero los memes y el pitorreo se disparan

¿Qué es un camello? Un pequeño caballo pasado por una Comisión de investigación parlamentaria. Pues miren por dónde, es lo que anhelan todos los precitados, políticos, todos ellos que representan a una minoría de españoles y que tienen una presencia parlamentaria reducida... porque adoran los días de gloria que les otorgan.

Pero sí, supongo que el asunto del espionaje es serio, más que por el qué, por el quién está detrás de la violación telemática. Y si está Mohamed VI, el problema se agrava.

En cualquier caso, Pedro Sánchez es socio del ridículo y hermano del patetismo. Acaba de ceder el Sahara a Marruecos y resulta que en Madrid crece esa convicción de que detrás del espionaje está Mohamed VI. Para documentar el indicio, el diario británico The Guardian asegura que fue Rabat quien ordenó el pinchado de 200 móviles españoles. Recordemos que Pegasus es israelí y que el Gobierno de Jerusalén ha encontrado en Marruecos su mejor aliado en el mundo árabe, que ha reconocido al Estado de Israel y establecido relaciones diplomáticas con el Estado hebreo.

Mientras, nuestra progresía política clama por una comisión de investigación parlamentaria. Eso, sin duda, lo arreglará todo

Todo ello en medio de una luna de miel ente Marruecos y Estados Unidos, con maniobras militares conjuntas incluidas. Washington y Rabat se aman más que nunca, justamente cuando parece que, como dijo alguien en Vox, Mohamed VI parece haber sodomizado políticamente a Pedro Sánchez.

Pues bien, si Marruecos es quien está detrás de los pinchazos, Sanchez tendría un oportunidad formidable para romper con Rabat y enfrentarse con Marruecos, que es lo que España no hace desde hace 25 años: grave error.

Por cierto, las llegadas de inmigrantes ilegales se han detenido en Ceuta y Melilla pero, ojo, no en Canarias. Es decir, tras conquistar el Sahara y confinar las dos plazas españolas en África, Rabat va ahora a por las islas.

Don Pedro, es usted un genio.