Consejo de ministros del martes 25 de noviembre. El fiscal general del Estado sigue siendo la estrella de la fiesta pero lo ha estropeado un poco, él mismo, con su carta de renuncia en la que asegura que es el momento de "abandonar el cargo". Don Álvaro, usted no ha abandonado ningún cargo, le han echado. Pero, naturalmente, Sánchez no se para en barras: ha aprovechado para lanzar una ofensiva contra el Tribunal Supremo, bajo el no muy sincero "acato el fallo del Supremo, pero...". Nunca se había vivido un ataque político como este al máximo órgano de la judicatura. 

De postre, el sustituto de García Ortíz será Teresa Peramato, una feminista radical especialista en violencia de género. Y todo esto quiere decir algo muy sencillo: Sánchez no piensa ceder un ápice en su control de la judicatura y de la prensa, convertidos en sus principales opositores. 

El Gobierno continua atacando al Supremo para defender al fiscal general del Estado... y se enorgullece de que su sucesora sea una feminista radical

La única sorpresa en la rueda de prensa posterior al Consejo ha sido lo que nunca debería constituir una sorpresa. La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, ha calificado como "indecente" el ERE de Telefónica. Indecente es otra cosa, pero, en cualquier caso, lo que queda claro es que un socio del Gobierno de coalición progresista está poniendo como no digan dueñas al socialista que Sánchez ha colocado al frente de Telefónica y, cuyas primeras medidas han consistido en despedir a 5.692 empleados, 300 más de los previstos ayer.

La segunda medida ha sido reducir a la mitad el dividendo de los accionistas de Telefónica, muchos de ellos pensionistas y, la tercera, subir la factura del teléfono. Todo ello, extraordinariamente progresista. 

Y, por supuesto, declaración al canto sobre la violencia de género en el Día de la Violencia contra la Mujer. Sólo recordar esto: si la mujer no sabe ejercer la violencia psicológica sobre el varón es que la mujer es idiota. ¿Es idiota la mujer? No. Pues entonces la mujer también ejerce violencia sobre el varón.