Hoy se cumplen 40 años de la firma del Tratado de Adhesión de España a la Unión Europea. Para celebrarlo, Pedro Sánchez y su ministro de Exteriores, José Manuel Albares, han decidido ceder definitivamente Gibraltar a Londres, que lo lleva usurpando durante más de tres siglos. Esto marcha. Decíamos ayer... 

Les resumo: Sánchez le regala Gibraltar al Reino Unido y Albares habla de acuerdo "histórico". Es la marca de la casa: rendiciones históricas que pasarán a la historia por la vergüenza torera que generan.

Mientras, Feijóo asegura que no le han avisado... en lugar de prometer que romperá el acuerdo y hará lo contrario: cerrar la verja de forma permanentemente y aislar a la colonia de la vergüenza

Hablamos de otra rendición cobarde del Sanchismo, que acabará en la consagración del Peñón como paraíso fiscal británico y como pasillo para introducir droga en España... así como la aceptación de la invasión de aguas españolas. En resumen, me orinan y digo que llueve. 

En el entretanto, Feijóo asegura que no le han avisado del acuerdo... como si eso fuera importante.

Lo que debería haber hecho Feijóo es proponer una alternativa, por ejemplo, prometer que romperá el acuerdo y hará lo contrario: cerrar la verja de forma permanentemente y aislar a la colonia de la vergüenza. Pero muchos españoles trabajan allí. Pues se crea una alternativa laboral en el Campo de Gibraltar. Con un centro logístico de Inditex y otro de Mercadona, bastaría. 

Cerrar la verja y aislar a los sinvergüenzas de los llanitos. Reino Unido ya no está en Europa pero Gibraltar está en el espacio Schengen... y los medios españoles aseguran que lo importante es que la policía española registrará a los entrantes en Gibraltar

Además, se trata de contrario a lo que el dulce Albares considera acuerdo histórico.

Cerrar la verja y aislar a los sinvergüenzas de los llanitos. Reino Unido ya no está en Europa pero Gibraltar está en el espacio Schengen... y los medios españoles aseguran que lo importante es que la policía española registrará a los entrantes en Gibraltar. Insisto: si me orinan digo que llueve.

España tiene un presidente que odia a España pero aún más graves que cuenta con un pueblo español que no sangra ni aunque les pinchen.