La jura del cargo como presidente del Gobierno de Pedro Sánchez ante su Majestad el Rey ha sido resultado todo un poema. No por la expresión de Sánchez sino por la del Rey. La real cara no exhibía el mayor de los regocijos.

prometer

Por cierto, en las redes hablan de que prometió y no juró su cargo. Pues mejor que prometa, porque jurar es prometer ante Dios y Pedro Sánchez es ateo y no cree en Dos, aunque cree firmemente en sí mismo. Así que mejor que se haya conformado con prometer su cargo como presidente del Gobierno.

Pedro Sánchez es ateo y no cree en Dos, aunque cree firmemente en sí mismo

Allí estaba Felipe VI, responsable indirecto de que se haya consumado: una vez más, el monarca ha ofrecido un Gobierno a un hombre que gobernará España con todo el elenco de enemigos jurados de España. No se atrevió en su día a negar la nominación de don Pedro y ahora no puede evitar soportar su groserías durante otros cuatro años.

Rey

Porque claro, ¿qué pasaría si cambiamos el referéndum de independencia por otro entre monarquía y república? ¡Qué idea!