En marzo de 2024 una indignada Ana Redondo reprochaba al diputado del PP, Jaime Santos, su "terrible falta de respeto por la igualdad y hacia las mujeres. Y su terrible machismo reaccionario. Machismo y negacionismo".

Entonces, al grito de "¡Vergüenza, vergüenza", la ministra de Igualdad le reprochaba al popular: "llevamos 48 horas con dos mujeres asesinadas y dos niños asesinados por violencia vicaria". 

 

¿Dónde se ha dejado su pregonada "vergüenza" la titular de Igualdad, ahora, cuando se apunta a la muerte de una mujer, por el fallo de las pulseras telemáticas, distribuidas por el ministerio de Igualdad? Verán, ahora Redondo cambia la palabra "vergüenza" por la palabra bulo. Se muestra en contra de la petición de reprobación para ella, por parte del PP,  porque "ninguna de las mujeres con pulsera han sido asesinadas". "Me quieren reprobar a mí, cuando ninguna de las mujeres que llevaban pulsera ha sido asesinada y no reprueban al señor Mazón, que tiene a su espalda más de 200 hombres y mujeres víctimas". 

Por cierto, el argumento del bulo es uno de los nexos comunes entre la ministra anterior, doña Irene Montero, y la actual. Otro, ambas son inasequibles a entonar el 'mea culpa'. 

 

Señora ministra ¿son un bulo las advertencias de jueces, abogados... y de las propias víctimas, esas a quienes usted dice proteger?

 

pulseras