
El Tribunal Constitucional -¡qué sorpresón!, aclaró Hispanidad- presidido por el jurista independiente Cándido Conde-Pumpido y vicepresidido por la igualmente independiente jurista Inmaculada Montalbán, ha decidido que la Ley de Amnistía de Pedro Sánchez es constitucional. Ni tan siquiera ha escuchado a Europa, que en esto se la ata con papel de fumar, y que ahora mismo interpone serias dudas a que esta ley no atente contra la normativa europea.
En cualquier caso, el asunto se ha consumado. ¿Qué más da una más? Cataluña se ha 'normalizado' y no se hable más.
Sánchez no ha arreglado el problema catalán: lo ha enquistado. Los catalanes no están más cerca del resto de España que ayer... y el resentimiento y el lavado de cerebro sobre historia e identidad continúa en los mismos niveles que en 2019
Sólo un par de apuntes: el fin no justifica los medios. Normal es lo que se atiene a la norma, y la ley de amnistía supone que unos delincuentes, no sólo son perdonados sino alabados. Es decir, que la Ley de Amnistía puede ser constitucional... pero es injusta.
Pedro Sánchez asegura que ha resultado eficacísima para tranquilizar Cataluña. Yo diría que ha resultado eficaz para calmar a Puigdemont y que siga votando por Moncloa, es decir, extorsionando al Sanchismo y a través de él al conjunto de España.
El problema de no querer estar con alguien es que ese alguien acaba por no querer estar contigo
En cualquier caso, lo de tranquilizar a los catalanes indepes es verdad y es mentira: es cierto que, en el noreste de España, la gente ya no quiere líos pero sigue queriendo la independencia. Sánchez no ha arreglado el problema catalán: lo ha enquistado. Cataluña no está más cerca del resto de España que hace seis años... y el resentimiento y el lavado de cerebro sobre historia y sobre identidad continúa en los mismos niveles que en 2019.
El problema de no querer estar con alguien es que ese alguien acaba por no querer estar contigo.