Escandalizados están tantos y tantas por la actitud de Donald Trump. Solo porque grupos de gente han rodeado la Casa Blanca y prendido fuego (a lo mejor no pretendían incendiar la sede del Gobierno, sólo calentarse en las frías noches de Washington). Sólo por esa fruslería, se pone como loco y calumnia a la extrema izquierda -cada día más extrema, cada día más progre y cada día más numerosa porque a ellas se han sumado los más majaderos del Partido Demócrata.

Eso sí: cuando la izquierda llega al poder se acaba la violencia callejera

Y atención a los antimanifa gringos: este es el mensaje. “Ya no se trata de la muerte de un hombre sino de cambiar el sistema”. ¿Comprenden? Y el cambio de sistema consiste, en nombre de la democracia, en la conversión de un sistema de libertades en un totalitarismo de corte progresista y raíz comunista.

¿Quién dijo que el marxismo murió con el muro? Sólo se ha adaptado.

Si cae Trump, se acelerará el intento de crear un Gobierno mundial, según los postulados NOM

Esta es la idea. La muerte de George Floyd es lo de menos, de lo que hablamos es de echar a Trump… y de modificar el sistema.

Pero lo importante es esto: la violencia crece en Occidente y la izquierda gana terreno. Eso sí cuando la izquierda llega al poder se acaba la violencia callejera. Como por ensalmo. Mientras tanto, RTVE habla de violencia contra la brutalidad policial. O sea, saqueos y violencia progre.

Pero, ténganlo claro: si cae Trump, se acelerará el intento de crear un Gobierno mundial, según los postulados NOM.