- La derecha española, claro está.
- Ahora es derecha pagana.
- Y de derecha pagana pasaremos a derecha cristófoba.
- Aznar aplicaba los principios cristianos en los que creía; Rajoy ya ni cree en ellos.
Dicen que tras la caída de Federico Trillo, como ocurriera con Rita Barberá, caídas forzadas por la propia camarilla cobardona de Mariano Rajoy,
el Aznarismo ha muerto.
Es cierto y no tiene por qué ser malo. Bueno, algo sí que lo es porque supone un paso más en la campaña de
descristianización acelerada del Partido Popular y del conjunto de la derecha española (Ciudadanos es de derechas pero ya ha nacido post-cristiano).
La diferencia estriba en que
Aznar mantenía el título de cristiano, aunque fuera un incoherente con todos sus
principios. Con él empezó el imperio de la
ideología de género, por la vía del
aborto, verdadera carcoma de la civilización cristina en el PP y desde entonces no ha caído. Por decirlo así, Aznar prescindió de sus principios católicos en la vida pública.
Mariano Rajoy simplemente ha dado un paso más: su política no es católica ni en la teoría ni en la práctica. No hablo de él -Dios juzgará su conciencia, no yo- sino de su actividad política. Pero recuerde que Mariano Rajoy, a título personal, no nos importa. Nos importa porque es presidente del Gobierno, y lo que hace como tal nos afecta a todos.
Por tanto, ¿es lo mismo Aznar que Rajoy? No exactamente. El
marianismo ha dado ese paso más dentro de un mismo proceso hacia la derecha pagana. O si lo prefieren, es pasar de la derecha teóricamente cristiana y en la práctica pagana de don José Mará Aznar a la
política pagana, en teoría y práctica, de don Mariano Rajoy.
O dicho de otra forma: ya antes de llegar al poder, en 1996, Aznar borraba de los borradores de discurso que le pasaban cualquier referencia al derecho a la vida. Se suponía que él era provida pero no le gustaba mencionarlo.
Rajoy, sin embargo, huye de todos aquellos medios informativos o instituciones, no ya que puedan hacer una interpelación cristiana, sino ni tan siquiera moral. El es un laico de pro… y un sectario de marras. Eso sí, de derechas de toda la vida.
La derecha española ha dejado de ser católica. Ahora es derecha pagana. Dentro de poco,
derecha cristófoba, empezando por la ideología de género. Personajes como el propio Rajoy, Soraya Sáenz de Santamaría, Cristina Cifuentes, Javier Maroto y Andrea Levy representan a esa nueva derecha. Y claro, nadie da lo que no tiene.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com