Consejo de Ministros del martes 20 de mayo. 142 millones de euros para el plan Corresponsables. La ministra Ana Redondo sale a escena con su discurso habitual: a partir de una premisa falsa y elabora unas premisas perfectas, que por perfectas, dado su origen, falsa llegan a una conclusión disparatada.
Redondo llama 'Corresponsables' a una generosa dotación presupuestaria, o sea, nuestro dinero contra la brecha de genero, según la premisa de que son iguales... cuando afortunadamente no lo son.
¿Como lo vende Redondo? Así: "Vivimos una ola reaccionaria, misógina y machista". Como prueba de ello pone sobre la mesa la "ola reaccionaria, misógina y machista". Y por cierto, dice que la pornografía es mala. En efecto, la pornografía es mala, pero la progresión, es decir, el feminismo, lleva sesenta años, desde el Mayo francés, aplaudiendo la libertad de las mujeres para exhibir su cuerpo.
El problema de la naturaleza, conocido por la progresión como "estereotipos sexistas".
Los jóvenes no se han vuelto machistas, lo que ocurre es que su feminismo es más falso que una moneda de tres euros: no todas las mujeres son santas ni todos los hombres son canallas
Vamos con las premisas falsas de las que surgen conclusiones disparatadas. Redondo habla sin parar de las nuevas masculinidades. Pues mire usted, señora ministra, las nuevas masculinidades no son sino un intento de acabar con la virilidad, un proceso cuasi forzado de feminización del varón. Si la feminidad es necesaria para la humanidad, la masculinidad también.
Otrosí: los jóvenes no se han vuelto machistas, lo que ocurre es que su feminismo institucional y pagado con nuestros impuestos, es más falso que una moneda de tres euros: no todas las mujeres son santas ni todos los hombres son canallas... seña ministra.
Adolescentes y jóvenes. Señora Redondo: la juventud es sincera: por eso no acepta su feminismo... porque su feminismo huele a falso
Colofón: adolescentes y jóvenes tienen muy preocupada a Ana Redondo: cada día se muestras más machistas. Verá usted, doña Ana: no es que se hayan vuelto más machistas sino que adolescentes y jóvenes, con un montón de defectos, son más sinceros que los adultos, como usted y como yo. Y claro: su feminismo, el de la progresión, les huele a falso, a muy falso