Sr. Director:
Las reiteradas condenas del atentado terrorista en las Ramblas de
Barcelona, y la subsiguiente llamada a la unidad de todos frente al
terrorismo, exige un ejercicio de reflexión y de distinción, sobre
todo ante el fenómeno de las redes sociales, para no confundir los
planos, caer en tópicos, ni favorecer reacciones fuera de lugar.
La acción terrorista es obra de unos criminales que realizan un acto
intrínsecamente perverso, que no tiene justificación alguna. Un crimen
contra la humanidad alejado de toda práctica adecuada del Islam, una
religión de paz a la que determinadas concepciones ideológicas han
arrastrado hacia imágenes deformadas. Ninguna causa justifica la
violencia ni la muerte de nadie.
La religión es la antítesis del terrorismo y de la violencia. Ningún
pueblo es violento por naturaleza aunque haya personas que hayan
convertido su religión en una ideología que se ha vuelto contra la
creencia auténtica.
Jesús D.
Dile a los jueces y juezas... Vicente Vallés, ejerciendo de feministo
14/12/24 15:00