Sr. Director: La iniciativa es de Rajoy, y la responsabilidad es de Sánchez y Rivera, a quienes se les están agotando los argumentos de desgaste del candidato del PP. Sánchez y Rivera son ahora, más que antes, responsables del bloqueo institucional, y su actitud está anclada en el inmovilismo. El hecho de afirmar que no quieren unas nuevas elecciones, y al tiempo no cambiar su bloqueo al único candidato posible, es una contradicción. La presión mediática de Pedro Sánchez para meter prisa a Rajoy, basada en aparentes argumentos jurídicos sobre la interpretación del artículo 99 de la Constitución, no deja de ser un intento de desgaste por parte de quien está empeñado en frustrar la investidura, un acto irresponsable respecto al bien común de los españoles. La propuesta de Rajoy de un gobierno constitucional sigue sobre la mesa, aunque algunos de los que deberían formarla no la consideren factible.  Esta opción sería, sin duda, la mejor para el futuro de España. O en su defecto, un gobierno en minoría con acuerdos de Estado sobre materias clave, basado en la lealtad de todos. La complejidad del momento no debe hacer olvidar su urgencia. Pedro J. Piqueras