No pretendo ofender a nadie, ni tan siquiera a los que el sábado salieron a la calle para hacerle el juego a tres irresponsables, que quieren destrozar nuestro País engañando a unos ignorantes.
Desde la independencia que me da el no ser ni político, ni periodista, ni persona pública de ninguna clase, quiero denunciar la "locura" que se está produciendo sobre todo en la clase social menos instruida y más lega en materia política, terreno en el que arraiga mejor el populismo, la mentira y el afán de los "sin escrúpulos" por someter a un pueblo honrado y sincero.
Es blanco y en botella la intención de estos "salva-patrias" y los que no lo vean así, puedo asegurar que "son ciegos". Sin haber hecho otra cosa que predicar en las televisiones traidoras, ya son corruptos; ¿Cómo sería si llegasen a tomar el poder?
No se puede defender un comportamiento envidiable de los gobernantes actuales, ni de los anteriores; la ineptitud, la corrupción y el desinterés por la defensa de los ideales del pueblo, son las banderas y el mérito de estos señores.
Pero no por eso hemos de suicidarnos arrojándonos por el precipicio de Podemos. El "judas" de Rajoy, que embaucó a sus votantes prometiéndoles rectificar la nefasta política social de Zapatero, es una de las causas del malestar popular, pero no justifica tanta desesperación como presentan los que se entregan a los brazos de unos populismos conocidos y muy trasnochados. ¿Quieren que nuestro País se convierta en Cuba, Venezuela, Bolivia, Argentina,…?
Por favor, un poco de sensatez que los españoles no nos merecemos eso. Tened un poco de juicio. Comprendo la exasperación de quienes se encuentran ociosos esperando la oportunidad de ser útiles a la sociedad y encontrar la ocasión de su sustento. Pero, ¿sabéis lo que nos espera si estos señores controlan el poder? Mirad hacia esos países que toman como modelos, algunos están entre los más ricos del mundo, pero su gente la más pobre.
Sería preciso que reflexionaseis sobre la educación que espera a vuestros hijos, las libertades de información y movimiento, el destino de vuestras propiedades, la libertad religiosa, la democracia, los valores morales (ya muy debilitados), el libre abastecimiento (sin cartillas), las ideas políticas, el estado de bienestar, …
Si continuáis en ese empeño de destruir España, por culpa de la traición de Rajoy y la ineptitud de Zapatero, por favor, advertirlo para que vayamos preparando el pasaporte y emigrar a otras tierras.
Pablo D. Escolar