La vivienda ha subido una barbaridad durante el periodo socialista y se ha puesto imposible para familias escasamente dotadas por la diosa Fortuna, esa miserable ramera. El presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, se plantó ayer en el Congreso y afirmó que se había reducido el precio de la vivienda. Se ha reducido durante su mandato un 70%, al pasar de una subida media, durante el Aznarismo, del 19% al actual 5,8%.
El asunto no tiene ni pies ni cabeza, dado que se está tomando el último año de gestión socialista, no el periodo 2004-2007. En segundo lugar, porque "reducir el ascenso" no es bajar el precio. El análisis de los porcentajes es necesario, pero, de vez en cuando, conviene reparar en las cifras absolutas; los vídeos son buenos, pero la foto fija mantiene su importancia, pero, sobe todo, porque ningún producto o servicios puede subir de forma indefinida, y mucho menos a esas tasas. Es evidente que Aznar fracasó en política de vivienda, pero, precisamente por la fuerte subidas del periodo 1996-2004, cualquier subida adicional es excesiva.
Y que ZP presuma de ello es, simplemente, una tomadura de pelo.
